Los de Elon Musk han protagonizado una de las mayores subidas este año
200 millones de acciones. Al día. Ese es el volumen de negociación que dejan Tesla y NIO, su gran competidora china. La edad media de sus accionistas, jóvenes e inherentemente arriesgados, ayuda a entender parte de este fenómeno. Pero Jeff Reeves, de MarketWatch, expone una serie de motivos por los que elige a la asiática como su caballo ganador para 2021.
-Tesla no tiene por qué ser sinónimo de coche eléctrico: Reeves recupera aquellas palabras de un analista de Roth Capital Partners, que en noviembre señaló a Tesla como "una acción paraguas" que está directamente relacionada con el resto de nombres del sector.
¿Esto quiere decir que si las ventas de coches eléctricos crecen en todo el mundo también lo hará la capitalización de Tesla? Reeves cree que no: "Igual que la burbuja de las puntocom separó a las empresas de verdad como Google de aquellos 'impostores' como theGlobe.com, la gente dejará en algún momento de comprar la tendencia e invertir en títulos individuales, y ahí es donde empiezan los problemas para Tesla, dada su elevada valoración".
-A Tesla aún le queda mucho por hacer en China: los de Elon Musk tienen grandes planes para el país asiático, donde NIO juega en casa. En palabras de Reeves, Tesla solo ha vendido 21.600 coches en noviembre, "algo lo suficientemente bueno para confirmarse como la tercera vendedora por cuota del mercado, pero nada del otro mundo".
-NIO tiene todo su potencial por delante: la china 'solo' ha entregado 36.700 vehículos en lo que va de 2020, pero la cifra ya representa un salto del 110% respecto a 2019. Además, está invirtiendo agresivamente para seguir adelante con su crecimiento. De hecho, sus cifras actuales recuerdan a la de la primera Tesla, que también empezó entregando unos 30.000 coches que pasaron a ser 300.000 unos años más tarde.
-No hay término medio en Tesla: Reeves subraya que Goldman Sachs le dedica un precio objetivo de 780 dólares a los de Musk, que solo 'valen' 90 dólares por acción, según los expertos de JP Morgan. Para todos aquellos inversores que quieran dejar atrás todo el ruido mediático, "NIO es una opción que, la mayoría de ocasiones, deja de lado esa histeria y sin dejar de ser una fabricante con potencial".