Los resultados de la banca también han copado la atención de los inversores
Wall Street ha cerrado con ventas destacadas este viernes (Dow Jones:-1,24%; S&P500:-1,46%; Nasdaq:-1,62%) tras el rebote del jueves, liderado por los valores tecnológicos, que llevaron al Nasdaq a marcar un nuevo máximo histórico en precios de cierre. Esto, a medida que el mercado asimila que la Reserva Federal (Fed) no va a poder iniciar las bajadas de tipos en el mes de junio, como se había descontado, y que posiblemente lo hará menos de las tres veces que esperaban los inversores.
"Los precios industriales de EEUU repuntaron en marzo, al igual que el IPC, mostrando mayores presiones inflacionistas, y Collins (Fed) ya da casi por hecho que los tipos bajarán menos de lo esperado este año", valoran en Bankinter.
Al mismo tiempo, el presidente de la Reserva Federal de Nueva York, John Williams, ha vuelto a insistir en que el banco central estadounidense podría necesitar más tiempo para generar la confianza necesaria que dé lugar a una flexibilización de la política monetaria.
En el cómputo semanal, los índices neoyorquinos han registrado una semana de pérdidas, lideradas por las caídas del 2,37% del Dow Jones, mientras que el S&P500 y el Nasdaq han cedido un 1,55% y un 0,45%, respectivamente.
El otro punto de interés para los inversores ha estado en el inicio de la temporada de resultados, con los grandes bancos de EEUU dando el pistoletazo de salida.
"Si en las últimas sesiones ha sido la macroeconomía la que ha determinado en gran medida el comportamiento de las bolsas, a partir de este viernes será la microeconomía, concretamente los resultados trimestrales de las compañías cotizadas, la que pasará a centrar la atención de los inversores ya que comienza en Wall Street de forma oficiosa la temporada de publicación de los resultados del pasado trimestre", explican en Link Securities.
De este modo, han empezado a rendir cuentas JPMorgan, Citigroup, Wells Fargo y BlackRock, con unas cifras muy dispares.
El primero en confesarse ante el mercado ha sido BlackRock, que ha elevado su beneficio neto un 36%, hasta los 1.573 millones de dólares entre enero y marzo respecto a los 1.157 millones conseguidos en el mismo periodo del año pasado. Asimismo, los activos bajo gestión (AUM, por sus siglas en inglés) han ascendido a un récord de 10.472 millones de dólares, un aumento del 15% impulsado por "un crecimiento orgánico constante y movimientos positivos del mercado".
JP Morgan también ha registrado una mejora de su beneficio neto, que se ha situado en 13.419 millones de dólares, un 6% más que los 12.622 millones de dólares del mismo periodo del año anterior. No obstante, Jamie Dimon, presidente y consejero delegado del banco, ha advertido de un "panorama mundial inquietante". La firma se ha dejado un 6,47% en bolsa este viernes.
En el lado contrario, Wells Fargo, que ha informado que sus beneficios menguaron un 7% en el primer trimestre de 2024, afectados por unos menores ingresos netos por intereses.
Por su parte, Citigroup ha anunciado que las ganancias cayeron un 27% hasta los 3.371 millones de dólares, para un total de 1,58 dólares por acción, muy por encima de los 1,23 dólares por acción que proyectaban los analistas. La firma achaca este resultado a mayores pérdidas netas de crédito en tarjetas, parcialmente compensadas por una menor reserva para pérdidas de crédito acumulada.
En cuanto a la agenda económica, este viernes se ha dado a conocer el sentimiento del consumidor de la Universidad de Michigan, que ha mostrado un repunte de las expectativas de inflación en abril hasta el 3,1% a 12 meses.
En el plano empresarial, Apple planea revisar la línea de productos Mac para incorporar nuevos chips centrados en inteligencia artificial (IA).
Además, las acciones de Advanced Micro Devices (AMD) y de Intel han perdido un 4,23% y un 5,16% en bolsa este viernes, respectivamente, ante una información que asegura que el Gobierno de China ha pedido a las principales operadoras de telecomunicaciones que dejen de emplear chips fabricados en otros países.
En otros mercados, el petróleo West Texas ha subido un 0,61% ($85,54) y el Brent ha avanzado un 0,58% ($90,27). Por su parte, el euro se ha depreciado un 0,76% ($1,0642), y la onza de oro ha perdido un 0,57% ($2.359).
Además, la rentabilidad del bono americano a 10 años se ha relajado al 4,518% y el bitcoin ha cedido un 4,38% ($67.388).