Pérdidas en Wall Street con el foco en el petróleo y su impacto en la inflación

"La medida de la OPEP+ es particularmente inútil para los bancos centrales que, si bien están preocupados por la inflación rígida, se preocupan cada vez más por elevar las tasas desde sus niveles actuales. Estas preocupaciones son especialmente pertinentes debido a los temores recientes sobre la estabilidad financiera, ya que los rendimientos retroceden hacia sus máximos recientes", destaca Michael Hewson, analista jefe de mercado en CMC Markets.

Con todo, la angustia se ha instalado entre los operadores, ya que los recortes han llegado cuando las economías se dirigen hacia una desaceleración económica, "lo que plantea la pregunta de si la OPEP+ se está anticipando a una desaceleración o simplemente está tratando de respaldar los precios para su propio beneficio", añade Hewson.

En este sentido, un rápido aumento en los precios del petróleo también frena el crecimiento global, lo que tendría un impacto en las perspectivas de demanda y limitaría el potencial de recuperación.

"Las perspectivas de precios más altos del petróleo significan un cierto cambio de sentido en las expectativas de inflación, lo que significa más aumentos de las tasas de interés por parte de la Reserva Federal (Fed)", explica Ipek Ozkardeskaya, analista sénior de Swissquote Bank.

Pero 'felizmente', las previsiones sobre los tipos no solo están impulsadas por las expectativas de inflación, "sino también por el temor a una recesión, que aumentó significativamente el mes pasado debido a la crisis bancaria", indica Ozkardeskaya.

En la agenda económica, este martes se ha conocido la encuesta JOLTS de ofertas de empleo, muy seguida por los inversores para determinar la evolución del mercado laboral estadounidense, que ha mostrado un descenso de las vacantes hasta los 9,9 millones, mientras que el consenso esperaba que se ubicaran en 10,5 millones.

Los analistas de Oxford Economics consideran que este informe "es una indicación de que el debilitamiento del mercado laboral puede estar cobrando cierto impulso. Sin duda, las ofertas de trabajo siguen siendo muy elevadas, pero el nivel de febrero es el primer mes por debajo de 10.000 desde junio de 2021 y sugiere que las empresas se están volviendo más cautelosas sobre el personal adicional".

"La Fed está en camino de aumentar las tasas en 25 pb más en las reuniones de mayo y junio y necesitará ver mucho más progreso para determinar si se han logrado sus objetivos", agregan.

TENSIONES ENTRE EEUU Y CHINA POR TAIWÁN

El mercado también está atento a las tensiones geopolíticas entre China y EEUU por Taiwán. El gigante asiático ha enviado una fuerte advertencia al país norteamericano y le ha pedido al presidente de la Cámara de Representantes que no se reúna con el presidente de Taiwán.

"Taiwán es un tema inmensamente sensible para China, y en este tema, las tensiones también han estallado dramáticamente entre EEUU y China antes. El presidente Biden tuvo que dar un giro en U a sus comentarios anteriores para calmar las cosas", afirma Naeem Aslam, jefe de inversiones de Zaye Capital Markets.

"Creemos que los inversores deberían seguir vigilando de cerca esta situación, ya que las cosas pueden salirse de control con bastante rapidez y nadie realmente necesita otro conflicto geopolítico en esta etapa, especialmente porque todos ya están pagando un precio mucho más alto por el conflicto en marcha entre Rusia y Ucrania", indica Aslam.

EMPRESAS Y OTROS MERCADOS

En el plano empresarial, Virgin Orbit se ha declarado en bancarrota y ha solicitado acogerse al Capítulo 11 tras no poder asegurar su financiación.

La compañía de lanzamiento de satélites con sede en California está buscando vender sus activos, después de anunciar el cese de sus operaciones y el despido de casi toda su plantilla.

En otros mercados, el petróleo West Texas ha subido un 0,11% ($80,51) y el Brent ha perdido un 0,14% ($84,81). Por su parte, el euro se ha apreciado un 0,55% ($1,0955), y la onza de oro ha subido un 1,94% ($2.039), y ha alcanzado máximos anuales.

Además, la rentabilidad del bono americano a 10 años ha caído al 3,35% y el bitcoin ha ganado un 0,33% ($28.218).