Los inversores también siguen de cerca el conflicto en Oriente Medio
Wall Street ha finalizado con signo mixto este viernes (Dow Jones: +0,12%; S&P 500: -0,50%; Nasdaq: -1,23%) tras el cierre bajista del jueves, después de un dato de IPC en Estados Unidos por encima de lo previsto y una débil subasta de bonos del Tesoro de EEUU a 30 años realizada durante la jornada.
La incertidumbre de las últimas sesiones ha llevado a los índices neoyorquinos a registrar un balance semanal mixto, con el Dow Jones ganando un 0,8% y el S&P 500 avanzando un 0,45%, mientras que el Nasdaq ha retrocedido un 0,18%.
Esto tras descontar los resultados de JP Morgan, Citi y Wells Fargo. Las cifras de estos bancos han superado los pronósticos, pero las declaraciones del CEO y presidente de JP Morgan, Jamie Dimon, no han gustado al mercado.
"Nos encontramos en el momento más peligroso que el mundo ha visto en décadas", ha sentenciado el banquero, una de las voces más influyentes actualmente en los mercados.
Por otra parte, Microsoft ha superado el último obstáculo que le faltaba para comprar Activision Blizzard por 69.000 millones de dólares, después de obtener el permiso del regulador británico.
En la agenda económica, la clave ha sido la confianza del consumidor estadounidense de la Universidad de Michigan, que ha bajado hasta los 63 puntos desde los 68,1 previos, retrocendiendo alrededor de un 7% este mes después de dos meses consecutivos de muy pocos cambios. También se han incluido las expectativas de inflación a 5 a 10 años, que se han situado en el 3%, registrando un crecimiento desde el 2,8% de septiembre.
En China, el IPC de septiembre ha aumentado menos de lo previsto, y los datos de exportaciones e importaciones del mismo periodo han bajado más del 6%, en ambos casos.
Estas cifras muestran "una vez más que la economía china sigue teniendo problemas", según indica Michael Hewson, analista jefe de CMC Markets UK, lo que no contribuye a impulsar el optimismo del mercado.
En otros mercados, el precio del petróleo ha subido con fuerza. El crudo West Texas ha repuntado un 5,70% ($87,64) y el Brent ha rebotado un 5,6% ($90,88), mientras el euro se ha depreciado un 0,12% ($1,0513) y la onza de oro ha avanzado un 3% ($1.941).
La cotización del 'oro negro' ha permanecido condicionada por el conflicto en Oriente Medio. Israel ha dado 24 horas a los habitantes del norte de la franja de Gaza para que vayan hacia el sur del territorio. Esto anticipa una ofensiva terrestre por parte del ejército israelí en las próximas horas o días.
Mientras tanto, el secretario de Estado de Estados Unidos, Anthony Blinken, ha mostrado su apoyo a Israel, aunque ha añadido que su objetivo es evitar que el conflicto se transforme en una guerra regional.
En este sentido, el ministro de Asuntos Exteriores de Irán, Hossein Amir-Abdollahian, ha dicho que la "continuación de los crímenes de guerra contra Palestina y Gaza" podría abrir un nuevo frente de guerra, y que Israel será "responsable de las consecuencias".
Tras reunirse con el líder de Hizbulá, Hassan Nasrallah, la milicia que apoya a los palestinos desde el Líbano, país fronterizo con Israel, ha añadido que "por supuesto, en el caso de la continuación de los crímenes de guerra y el bloqueo humanitario de Gaza y Palestina, todas las posibilidades y decisiones de las otras corrientes de la resistencia son posibles".
La posibilidad de que el conflicto se convierta en una guerra regional entre Israel e Irán es el principal riesgo para los mercados.
Por último, la rentabilidad del bono americano a 10 años se ha relajado al 4,62%, y el bitcoin ha subido un 0,24% ($26.763).