Las tres razones que explican la inmunidad de Wall Street frente al Covid-19
La Bolsa de Nueva York ha rebotado de una manera prodigiosa
Wall Street se desplomó más del 35% en apenas un mes desde los máximos históricos que marcaron los índices neoyorquinos a mediados de febrero. Fue la caída más vertical de la historia, lo que provocó el mercado bajista más rápido (caída superior al 20%) nunca visto anteriormente. Todo ello originado por la pandemia del Covid-19, que se ha cebado sobre todo con la Unión Europea y Estados Unidos.
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Sin embargo, desde los mínimos marcados por Wall Street el pasado 23 de marzo, la Bolsa de Nueva York ha rebotado de una manera prodigiosa y ha reducido su caída de manera considerable, hasta tal punto de que muchos se preguntan si ha comenzado un nuevo mercado alcista, ya que la subida hasta los máximos de abril ha superado el 30%.
"Eso plantea la pregunta de porqué las acciones estadounidenses están demostrando ser tan resistentes y si el rally es sostenible", afirma Russ Mould, director de inversiones de la firma especializada AJ Bell. Pese a los terribles datos económicos publicados en EEUU y la situación de confinamiento, el S&P 500 tan sólo cae un 3% en los últimos doce meses y el Nasdaq acumula una subida del 6%.
RAZONES PARA EXPLICAR EL HISTÓRICO REBOTE
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En primer lugar, es necesario destacar que el sector de la tecnología, al igual que ha hecho desde la crisis de 2009, ha sido el principal impulsor del histórico rebote. Valores como Amazon y Netflix han marcado máximos históricos en las últimas jornadas y los inversores descuentan que la pandemia seguirá reforzando el papel de la tecnología en el futuro.
Las previsiones anticipan que el sector tecnológico generará el 23% de las ganancias de 2020 en la Bolsa de Nueva York, lo cual explica buena parte del rebote que ha registrado el Nasdaq y el mercado en su conjunto.
Por otro lado, Russ Mould afirma que el mercado ha descontado una recuperación de los beneficios empresariales en forma de V, que será liderada por el sector financiero, las empresas de consumo discrecional y la industria, con un mayor crecimiento de la tecnología a fines de 2020 y 2021 que brindará un soporte adicional. "Las estimaciones sugieren que las ganancias corporativas de EEUU volverán a crecer año tras año para el primer trimestre de 2021", afirma este experto.
El tercer factor para explicar la increíble recuperación de Wall Street es la gran batería de estímulos monetarios aplicados por la Reserva Federal para combatir la pandemia. Se trata de la mayor inyección monetaria de la historia, que aumentará el balance de la Fed en unos 2,2 billones de dólares. A esto se unen las medidas económicas aprobadas por el Congreso, que ascienden a otros 2 billones de dólares.
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Los estímulos del banco central americano "proporcionan a los mercados financieros cantidades de liquidez barata con las que especular y puede ser el factor más poderoso de todos en el repunte del mercado bursátil estadounidense desde el mínimo del 23 de marzo y el más difícil de combatir para los escépticos de las acciones estadounidenses", explica Russ Mould.
RAZONES PARA DUDAR
No obstante, para este experto también hay razones para dudar del histórico rally. Si la recuperación de Wall Street realmente depende de la abundante liquidez proporcionada por el banco central, entonces será frágil, "ya que la Reserva Federal no puede imprimir dinero para siempre", argumenta.
Por otra parte, la asunción del mercado de que la recuperación económica sera en V todavía es arriesgada, ya que EEUU es uno de los países que peor respuesta está dando a la pandemia y es el más afectado. Donald Trump quiere reabrir la economía cuanto antes, pero sus asesores sanitarios advierten sobre el riesgo de que haya una segunda oleada de contagios que provoque un impacto económico aún mayor.
Con la valoración actual, el mercado ha descontado una caída del 12% de los beneficios empresariales, algo que parece muy optimista, ya que la crisis de 2008 provocó un desplome del 40%. Por tanto, es complicado anticipar que el rally actual de Wall Street sea sostenible durante los próximos meses, pese a la histórica recuperación de Wall Street desde los mínimos de marzo.