En Oxford Economics consideran que el banco central flexibilizará la política monetaria este año
Las elecciones presidenciales que Estados Unidos celebrará este año tendrán implicaciones en múltiples esferas, y una de ellas es la política monetaria, que afronta un curso crucial ya que la Reserva Federal ha adelantado su intención de recortar los tipos de interés antes de que finalice 2024. Los analistas de Oxford Econocmis se preguntan si los comicios podrán actuar como "un obstáculo" contra la flexibilización monetaria.
"La Reserva Federal es un pararrayos político porque la economía siempre es un tema importante para los votantes estadounidenses. Sin embargo, dudamos que las próximas elecciones disuadan al banco central de fijar lo que cree que es la postura adecuada para la política monetaria", aseguran.
Sin embargo, "algunos comentaristas han argumentado que las elecciones presidenciales obligarán a la Reserva Federal a quedarse de brazos cruzados este año", una postura que no comparten en la firma británica, puesto que no encuentran "evidencias de que este haya sido consistentemente el caso en el pasado".
"Si analizamos el registro histórico desde 1983, que abarca la mayor parte de la era moderna de una Fed con independencia política y objetivos de inflación, el banco central es sólo marginalmente menos activo en los meses previos a unas elecciones presidenciales en comparación con años sin elecciones. Hay una tendencia más pronunciada hacia que la Reserva Federal sea más activa en los meses posteriores a una elección", recuerdan.
No obstante, "esto no significa que las elecciones no serán parte de las discusiones políticas" de la Fed, aunque desde la firma consideran que finalmente no serán decisivas a la hora de fijar la fecha de inicio de los recortes de tipos.
"No creemos que las elecciones de este año sean un obstáculo para los recortes de tipos por parte de la Reserva Federal. Los funcionarios han indicado consistentemente que recortarían las tasas en 2024, tal como señalaron sus proyecciones de junio de 2022. Siguiendo sobre esas previsiones, no sería controvertido en un contexto de moderación de la inflación", agregan.
Sobre el impacto que los comicios tendrán en los principales mercados financieros, Eric Papesh, especialista de producto de renta variable en T. Rowe Price, destaca que se deben esperar "rendimientos positivos del mercado de renta variable estadounidense este año".
"Aunque los mercados tienden a comenzar los años electorales en una posición más débil, ya que los aspirantes compiten por la nominación a principios de marzo, en los años en que un presidente en ejercicio se presenta a la reelección, esa debilidad no persiste. De hecho, en los últimos 60 años, el mercado de renta variable estadounidense no ha caído durante un año electoral en el que el presidente en ejercicio se presentaba a la reelección", destaca.
Además, considera que "los presidentes en ejercicio tienen un fuerte incentivo para estimular la economía antes de las elecciones y es probable que la administración Biden utilice las herramientas a su disposición".
Sin embargo, el efecto sobre los mercados será distinto en función de quién ocupe la Casa Blanca. Este analista asegura que "esperaríamos ver más actividad de fusiones y adquisiciones bajo una presidencia de Trump que con otra de Biden".
"Varias áreas del sector financiero, incluidas las empresas de financiación al consumo y los bancos, probablemente verían ciertos requisitos regulatorios eliminados o reducidos. En general, se considera que Trump apoya más a la industria energética y se opone a las subvenciones ecológicas. Los sectores o empresas que se beneficiaron en gran medida de la Ley de Reducción de la Inflación de Biden podrían verse expuestos a pérdidas en caso de que Trump salga victorioso de las elecciones de noviembre", asegura.
Asimismo, destaca que "el sector sanitario es interesante", puesto que "suele ser un área muy influenciada por el ciclo político", aunque cree que en esta ocasión "puede verse menos afectada".
"Las políticas de ambos candidatos son bien conocidas, y es probable que ninguno de ellos cuente con una amplia mayoría en el Congreso para impulsar cambios en la legislación. Hay bastantes empresas que cotizan a niveles que reflejan mucha incertidumbre", destaca.
Con todo, asegura que "más allá de las incertidumbres relacionadas con las próximas elecciones, hay muchas otras cuestiones que nublan el horizonte", y agrega que "una economía fuerte pero en recesión, una inflación a la baja pero aún elevada y un mercado laboral tenso pero en declive son sólo algunas de las cuestiones que los inversores deben tener en cuenta a la hora de considerar su exposición a las distintas partes del mercado".
"Como siempre, creemos que lo mejor para la mayoría de los inversores es mantener una cartera bien equilibrada y diversificada con exposición al amplio mercado de renta variable estadounidense. Esto significa tener cierta exposición tanto a empresas de valor como de crecimiento, así como a valores de gran y pequeña capitalización", concluye.