Los índices estadounidenses están mostrando una debilidad en los últimos tiempos que podría terminar penalizando al resto de plazas mundiales
Ya estamos en el mes de mayo e inevitablemente se plantea la misma pregunta que todos los años. ¿Es conveniente salirse de la renta variable ahora y volver en otoño? Dado que las bolsas europeoas no lo han hecho excesivamente bien en el periodo estacionalmente alcista que se extiende desde diciembre hasta mayo, y dado que parece que se están animando en los últimos tiempos -e incluso algunas, como el Dax o el EuroStoxx, presentan figuras técnicas alentadoras- la respuesta sería que lo recomendable es permanecer invertidos. Sin embargo, como siempre, hay muchos matices.
La primera apreciación que se debe hacer en el momento actual de mercado es que Europa -por primera vez en mucho tiempo- está más fuerte a día de hoy que Wall Street y que sus principales índices (Dax y EuroStoxx) han dibujado figuras de vuelta que invitan a pensar que continuarán las alzas. Sin embargo, es importante también precisar que, desde Semana Santa, los índices del Viejo Continente acumulan subidas de alrededor del 10%. Esto, sumado a la debilidad de Estados Unidos, podría presionar a la baja las plazas a este lado del Atlántico.
Cuanto mayor sea la rentabilidad de los bonos, menos interés tendrán los inversores en la renta variable dado que pueden ganar más con la renta fija
El segundo aspecto que hay que valorar son los factores que están penalizando a las bolsas estadounidenses y hasta qué punto pueden seguir haciéndolo. Por un lado, está la subida del dólar y, por el otro, el aumento de la rentabilidad de la deuda pública. "Las alzas del dólar estadounidense están comenzando a ejercer una cierta presión a la baja en los mercados bursátiles de Estados Unidos", advierte el director de análisis de CMC Markets en Londres, Michael Hewson. Mientras tanto, "los mercados europeos han cerrado su sexta semana consecutiva de alzas", añade.
Los expertos de 'Bolsamanía' remarcan esa fortaleza de las bolsas europeas y creen que es momento de seguir invertido porque prevén que podrían seguir subiendo. Sin embargo, también hacen hincapié en el comportamiento de las bolsas estadounidenses y advierten de que, si estás no respetan soportes, arrastrarán inevitablemente al resto de plazas mundiales, incluidas las europeas.
En cuanto a esa subida de la rentabilidad de la deuda pública estadounidense, es una constante en lo que va de año. La rentabilidad de los bonos del Tesoro de Estados Unidos a diez años ha llegado a superar el 3%, niveles que no se veían desde enero de 2014, con una subida anual del 25%. La relación entre la rentabilidad de los bonos y las bolsas es inversa. Es decir, cuanto mayor sea la rentabilidad de los bonos, menos interés tendrán los inversores en entrar en renta variable dado que pueden ganar más con la renta fija.
Para el analista independiente José Luis Cava, la combinación de estos dos factores -la subida del dólar y de la rentabilidad de la deuda pública estadounidense- es tan determinante para la renta variable que, en el momento actual, recomienda tajante "estar fuera de la bolsa". Se refiere Cava en concreto a Wall Street y al S&P500 y, por extensión, al resto de bolsas mundiales, y apunta un aspecto, en su opinión, revelador: el hecho de que las empresas no hayan subido "después de haber presentado resultados tan buenos".
"(Las empresas) no han subido porque ha subido el dólar y la rentabilidad de la deuda pública", recalca Cava. "No va a haber un desplome en las bolsas, sino que se va a producir un movimiento lateral que va a durar años", predice el experto, que recomienda vender aprovechando las subidas puntuales que puedan producirse dentro de este movimiento lateral.
En este sentido, Charlie Musson, analista de AJ Bell, señalaba esta misma semana que la temporada de resultados había sido positiva, con un incremento interanual del beneficio por acción de alrededor del 20%, y que incluso se había producido una ola de grandes acuerdos de fusión y adquisición. "Sin embargo, las acciones estadounidenses, utilizando como referencia el S&P500, siguen cayendo casi un 1% en 2018 y se negocian un 7% por debajo de sus máximos históricos. Esto podría ser problemático para los alcistas, dado que parece que el mercado está luchando por progresar cuando todo marcha bien", aducía este experto.
Cava añade otros factores por los que cree que las bolsas estadounidenses van a continuar débiles. Explica que todas las buenas noticias de los resultados están ya descontadas y que los 'hedge funds' están "cargados", por lo que no van a comprar más.
Pero, como ocurre siempre, no todo el mundo tiene la misma opinión. Uno de los inversores más alcistas de Wall Street, Tony Dwyer, cree que la venta de acciones que se ha visto durante las últimas semanas en Wall Street es un error y recomienda no aplicar el 'Sell in May...'. "En última instancia, el mercado se mueve con la dirección de las ganancias empresariales. Esto definitivamente va a ser positivo en el futuro", ha declarado este experto a CNBC.