BBVA sopesa una adquisición y la entidad catalana es su principal objetivo
El sector bancario ha iniciado la sesión de este martes con fuertes subidas en el Ibex ante las expectativas de un baile de fusiones que se han desatado después de conocerse la más que posible unión entre CaixaBank y Bankia. No obstante, los números rojos se han impuesto en casi todo el selectivo español y solo Sabadell ha conseguido mantener el tipo.
La entidad catalana ha sumado este martes un 1,37%, aunque ha llegado a subir más de un 5%. Este repunte ha llegado después de conocerse que es objetivo de BBVA, que sopesa una fusión para no perder competitividad, tal y como ha adelantado 'Bolsamanía'. Las acciones del banco presidido por Carlos Torres también han cotizado con fuertes alzas en los primeros compases de la sesión, pero al cierre se han dejado un 1,43%.
En cuanto a CaixaBank y Bankia, que desde que anunciaron su intensión de unirse no han dejado de subir en bolsa, han terminado este martes con caídas del 2,66% y del 0,07%, respectivamente. Pese a estos retrocesos, el mercado ha demostrado en las últimas jornadas que aplaude esta operación que dará paso a un gigante de 65.500 millones de euros en el mercado español de los fondos de inversión, con una cuota de mercado combinada del 25%, muy por delante de sus principales competidores.
Por su parte, Santander ha cotizado con pérdidas del 2,99%, mientras que Bankinter ha sufrido una caída superior al 2,84%. La entidad naranja ha sido la única que no ha registrado números verdes durante la sesión de este martes, ya que los inversores se han tomado al pie de la letra las declaraciones que realizó la semana pasada su presidenta, María Dolores Dancausa. Durante el curso de verano organizado por la APIE aseguró que están únicamente centrados en su crecimiento orgánico y que, por tanto, seguirán con su camino independiente.
Varias casas de análisis ya han vaticinado un baile de fusiones al calor de la operación CaixaBank-Bankia. Este mismo lunes, Fitch publicó un informe en el que aventuraba una nueva oleada de consolidación en el sector bancario español, ya que el resto de entidades deben ganar escala o fortalecer sus modelos de negocio y franquicias para poder continuar siendo competitivos.