Cree que la fortaleza crediticia del sector se pondrá a prueba
Moody's ha dado un tajo a la calificación crediticia de 10 bancos estadounidenses este lunes. Pequeños y medianos han sufrido la rebaja de la agencia, que además ha colocado a otros seis gigantes bancarios en revisión para posibles recortes en el futuro. Lo ha hecho tras advertir de que la fortaleza crediticia del sector se pondrá a prueba por los riesgos de financiación y la menor rentabilidad.
Moody's ha recortado en un escalón la calificación de 10 bancos (entre ellos M&T Bank, Pinnacle Financial Partners, Prosperity Bank y BOK Financial Corp) y ha colocado a seis gigantes bancarios, como por ejemplo Bank of New York Mellon, US Bancorp, State Street y Truist Financial en revisión. Asimismo, la agencia ha cambiado a negativa la perspectiva de once grandes prestamistas, entre ellos Capital One, Citizens Financial y Fith Third Bancorp.
"Los resultados del segundo trimestre de muchos bancos mostraron crecientes presiones de rentabilidad que reducirán su capacidad de generar capital interno", ha apuntado la agencia en una nota para justificar su decisión.
Y ha añadido que "esto se produce cuando una leve recesión en Estados Unidos está en el horizonte para principios de 2024 y la calidad de los activos parece que va a disminuir, con riesgos particulares en las carteras de bienes raíces comerciales (CRE) de algunos bancos".
Para Moody's, las elevadas exposiciones CRE son un riesgo clave para el sector debido a los altos tipos de interés, la disminución de la demanda de oficinas como resultado del trabajo a distancia y una reducción en la disponibilidad de crédito CRE.
El golpe de la agencia a la banca americana se ha producido después de que la quiebra de Silicon Valley Bank (SVB) y Signature Bank a principios de este año desencadenase una crisis de confianza que provocó la retirada masiva de depósitos, sobre todo de las entidades regionales, a pesar de que las autoridades pusieron en marcha medidas de emergencia.
Pese a ello, Moody's ha advertido que los bancos con importantes pérdidas no realizadas que no se reflejan en sus ratios de capital regulatorio son vulnerables a una pérdida de confianza en el actual entorno de tipos altos. Y es que la política de endurecimiento monetario que viene aplicando la Reserva Federal (Fed) ha frenado la demanda y el endeudamiento.
De hecho, una encuesta del banco central publicada la semana pasada mostraba que los bancos estadounidenses informaron de un endurecimiento de las normas crediticias y de una menor demanda de préstamos tanto por parte de las empresas como de los consumidores durante el segundo trimestre.
En opinión de los expertos de Bankinter, "no es una buena noticia, pero tiene un impacto limitado". De hecho, destacan que el índice que aglutina la banca regional subió este lunes un +1,0% (vs +0,9% el S&P 500) y acumula una revalorización >18,0% en un mes. "La banca americana acaba de superar los test de estrés de la Fed y el volumen de depósitos se ha estabilizado", recuerdan estos expertos, que apuntan que "esto último es lo más importante, porque era la principal preocupación del mercado tras las caídas de SVB, Signature y la compra de First Republic por parte de JP Morgan".