La agencia señala que el enfoque de la UE estuvo totalmente en línea "tanto con la letra como con el espíritu"
La intervención de Banco Popular por la Junta Única de Resolución (JUR) el pasado martes y su posterior venta al Santander fortalece la credibilidad del régimen europeo de resolución bancaria y añade credibilidad a la posición oficial de la UE, partidaria de que los acreedores asuman de manera más consistente el coste de una quiebra bajo la Directiva de Resolución y Reestructuración Bancaria (BRRD), según la agencia Moody's.
Asimismo, la calificadora de riesgos destaca que la intervención resulta positiva para la solvencia de los acreedores sénior del Popular y es, "de una manera más amplia, positiva para la estabilidad financiera de la UE", defendiendo que, a pesar de resultar negativa para los bonistas júnior del Popular, "la medida respeta la jerarquía legal de las insolvencias".
"Fue la primera liquidación formal de la Junta Única de Resolución bajo la BRRD y añade credibilidad a la posición oficial de la UE de que los acreedores soportarán más consistentemente el costo de la quiebra bajo esta directiva", apunta la agencia, subrayando que la resolución del Popular "fortalece la credibilidad del régimen de resolución bancario de la UE".
En este sentido, Moody's considera que, a diferencia del reciente caso del italiano Banca de Monte dei Paschi di Siena, el enfoque de la UE en el caso del Popular estuvo totalmente en línea "tanto con la letra como con el espíritu" de la BRRD y destaca que la JUR ejecutó de manera efectiva la resolución de la entidad en el curso de una noche, sin demora aparente, probando exitosamente la nueva estructura institucional y comunicando de forma clara y coordinada al mercado.
No obstante, la agencia apunta que las lecciones para los bancos europeos en un sentido más amplio "son menos ciertas", recordando que las entidades del Viejo Continente aún carecen de pasivos dedicados a la absorción de pérdidas en un volumen suficiente para facilitar la liquidación una vez que un banco se convierte en inviable sin que operaciones clave y depósitos se vean negativamente afectados.
"Hasta entonces, habrá una falta de claridad acerca de cómo responderán las autoridades de resolución ante quiebras bancarias", advierte Moody's, subrayando que, sin embargo, las intervenciones tempranas como en el caso del Popular tienen potencial para resultar en menores tasas de pérdidas, más fáciles de absorber sin que los acreedores senior se vea afectados.