Tras el último órdago del presidente de EEUU a China, los inversores buscan refugio en el dólar, los bonos y el yen
Los efectos de las políticas de Donald Trump parecen no tener fin. La guerra comercial que ha abierto con China, y en la que el presidente de EEUU ha dado esta semana un nuevo paso al anunciar nuevos aranceles a los productos del gigante asiático por valor de 200.000 millones de dólares, está afectando, y mucho, al oro. Tanto que el metal precioso está perdiendo puntos como valor refugio.
Así lo dicen los expertos de Deutsche Fund, que aseguran que la intensificación de la disputa comercial entre EEUU y China ha provocado nuevas caídas en la bolsa, sobre todo en el índice S&P 500, y que los inversores han buscado refugio en otros activos, pero no en el oro. Se han ido al dólar, a los bonos del Tesoro estadounidense, y al yen, pero han pasado por alto el metal precioso.
En la última semana el oro acumula una caída del 3,5%, y desde los máximos del año, que marcó en los 1.365 dólares, se deja un 7,5%
De hecho, en la última semana el oro acumula una caída del 3,5%, y desde los máximos del año, que marcó en los 1.365 dólares, se deja un 7,5%. Darwei Kung, gestor de la firma, cree, según recoge Bloomberg, que también ha contribuido el hecho de que el coste de transacción de la onza de oro es relativamente más alto, aunque apunta que lo más determinante son los vaivenes de Trump en sus políticas, tanto en lo que respecta a China como en lo concerniente a Corea del Norte. Este experto señala que los constantes cambios de parecer del presidente estadounidense están alimentando las especulaciones, y son muchos lo que creen que podría cambiar de opinión de nuevo de aquí a unos meses.
Por eso los inversores no apuestan por el oro, ya que esa inversión podría verse debilitada en caso de tener que mantener estos activos durante un período de tiempo más largo. "La gente invierte en oro si realmente piensa que estos eventos geopolíticos durarán en el tiempo", argumenta Kung, que dice que Trump "ya ha demostrado que cambia de opinión muy rápido".
La "imprevisibilidad" de Trump afecta directamente al oro, insiste el experto de Deutsche Fund, que apunta que el diferencial de oferta y demanda sobre el oro es casi el triple que el del yen, por lo que en estos momentos es más caro para los inversores negociar con el metal precioso. Hasta ahora el interés de los inversores por el oro había sido "constante", dice Kung, que indica que la situación ha cambiado por completo y no descarta que pueda empeorar.
De hecho, asegura que la falta de atractivo del oro puede aumentar con el aumento de los tipos de interés. Hace una semana, coincidiendo con el inicio del último desplome del oro, la Reserva Federal estadounidense (Fed) anunciaba una subida de los tipos de interés en 25 puntos básicos, hasta la horquilla 1,75%-2%, y anticipaba dos nuevos incrementos en 2018. La situación se aprecia con claridad si se mira al SPDR Gold Shares, el mayor fondo negociado en bolsa respaldado por el metal precioso, cuyos activos han caído a su mínimo de casi cuatro meses.