El banco estadounidense mantiene su opinión poco positiva de la renta variable
JP Morgan no cambia su visión negativa de la renta variable, sino que se reafirma en sus dudas. El banco estadounidense avisa del "periodo estacionalmente complicado" en el que han entrado las bolsas (el que va de mayo a octubre y que sustenta el famoso dicho 'sell in may and go away' o 'vende en mayo y vete') y anticipa "más consolidación en los mercados de acciones en los próximos meses".
En este contexto, JP Morgan apuesta por la aparición de algunas rotaciones, lo que podría traer a escena a las pequeñas empresas. "El 'growth' (crecimiento) está por delante del 'value' (valor) en lo que va de año; las pequeñas empresas están muy rezagadas nuevamente en lo que va de año", explica. "Fundamentalmente, mantenemos la inclinación hacia el 'growth', la calidad y las grandes empresas, pero el cambio podría estar llegando, ya que las pequeñas empresas tienden a tener un mejor rendimiento a medida que el Banco Central Europeo (BCE) comienza a bajar tipos".
A nivel regional, en el primer trimestre, JP Morgan ha tomado beneficios en Estados Unidos frente a la 'sobreponderación' de la eurozona, y ha abandonado tácticamente su posición bajista a largo plazo en China. "El último movimiento del mercado hacia una operativa más defensiva debería tener continuidad, como se ha visto en el reciente rendimiento superior de los sectores de 'utilities' y productos básicos, junto con los sectores de materias primas".
Sigue habiendo demasiadas incertidumbres sobre la mesa, en opinión de los estrategas de la entidad estadounidense. Les preocupa que la inflación permanezca demasiado alta si no se crea holgura en la economía. También les preocupa la demanda y oferta adversas de bonos con primas por plazo negativas. Igualmente, les crea intranquilidad la expectativa del consenso de una aceleración de los beneficios empresariales de casi el 20% entre el primer y cuarto trimestre de este año, "lo que normalmente no sucede, especialmente si la economía se debilita en la segunda mitad del año". Asimismo, están preocupados ante la posibilidad de que los vientos de cola del consumidor cambien.
"La visión 'Ricitos de Oro' que el mercado abrazó en el primer trimestre de que la inflación y los tipos iban a bajar, pero al mismo tiempo iba a haber una aceleración de los beneficios empresariales y no se vería un aterrizaje de la economía sigue siendo inconsistente", afirman tajantes desde el banco.
JP Morgan lleva meses con la misma visión poco constructiva de las bolsas. Recientemente alertaba de la excesiva complacencia en el mercado de renta variable ante los "elevados riesgos" y el "panorama problemático". Insiste el banco en el riesgo de que la inflación permanezca en niveles "demasiados altos" y cuestiona una supuesta victoria de la Reserva Federal (Fed) en este sentido.
Tampoco la gusta a JP Morgan la elevada concentración de mercado en EEUU, con las grandes tecnológicas siendo las grandes artífices de los avances. "El dólar no ha parado de subir a lo largo del año, lo que históricamente ha supuesto un reto para la renta variable", afirma también el banco.