Para los expertos de Saxo Bank el futuro "parece ahora más sombrío que nunca"
¿Qué podemos esperar de 2024? Es la pregunta que se hacen los inversores a tenor de que el nuevo año se presenta con grandes desafíos geopolíticos a los que hacer frente y que pueden poner en jaque la tendencia desinflacionaria que comienza a tomar fuerza en la economía mundial. Ante esta situación, ¿cómo posicionar las carteras?
"El futuro, antes brillante, parece ahora más sombrío que nunca. Los conflictos geopolíticos aumentan sin solución. A pesar del deseo generalizado de cambio político, evidente en el auge de los partidos de extrema izquierda y extrema derecha, los resultados siguen siendo decepcionantemente similares", analiza Steen Jakobsen, director de inversiones de Saxo Bank.
Además, el experto considera que la productividad en la industria, la cultura y la política prácticamente ha desaparecido y "estamos inmersos en tonterías sin sentido en un mundo que necesita desesperadamente soluciones para agua potable, protección contra inundaciones, cambio climático, desigualdad, defensa, ciberseguridad, educación e infraestructura".
A nivel político, 2024 también se presenta cargado de retos, ya que aproximadamente el 40% de la población mundial acudirá a las urnas, y el creciente descontento con el establishment se trasladará a las elecciones en la UE, en EEUU y posiblemente en Reino Unido.
"Las elecciones políticas estarán impulsadas por el miedo y la retórica antisistema, y lo más probable es que el resultado económico sea un crecimiento lento y una inflación básica relativamente alta", advierte Jakobsen.
Desde su punto de vista, el primer y segundo trimestre plantean los mayores riesgos para las perspectivas económicas, mientras que el tercer y cuarto trimestre conllevan un mayor riesgo político.
Por todo ello, ¿en qué sectores merece la pena invertir?
La principal preocupación en 2024 es la posibilidad de una recesión y la falta de claridad sobre el panorama supone un desafío para los inversores.
Con todo, en Saxo Bank creen que la "idea clave" en 2024 es 'infraponderar' las megacapitalizaciones estadounidenses.
Para Peter Garnry, jefe de estrategia de renta variable de la firma, "el rendimiento superior de los '7 Magníficos' (Apple, Microsoft, Alphabet, Amazon, Nvidia, Meta y Tesla), de en torno al 100% en 2023 frente al 23,8% del S&P 500, no puede continuar a menos que este pequeño grupo de empresas tecnológicas estadounidenses se haga cargo de toda la economía y siga superando las fuertes expectativas de crecimiento en 2024".
En contraste, tiene una visión positiva sobre la renta variable de Reino Unido y Europa, que presenta un descuento de casi el 30% respecto a la estadounidense.
También se muestra optimista con los mercados de renta variable de India, México, Brasil y Vietnam, así como en materias primas, ciberseguridad y defensa, ya que el rearme, la deslocalización y la repoblación continúan sin cesar en este año.
En el caso de la renta fija, en Saxo Bank proyectan que el debilitamiento del crecimiento, la ralentización de la inflación y un entorno político incierto crearán el ambiente perfecto para que los bonos superen a otros activos.
"Los inversores en renta fija tienen la oportunidad de asegurarse uno de los rendimientos más altos en más de 10 años, por lo que es difícil que los valores de renta fija registren rendimientos negativos, incluso si los rendimientos vuelven a subir ligeramente", añaden.
El deterioro de la actividad económica y los tipos elevados suponen una amenaza para los ingresos y los márgenes de las empresas. Así pues, "favorecemos la calidad y esperamos que el diferencial de los bonos corporativos de menor calificación se amplíe sensiblemente", indican desde la firma de inversión.
Respecto a los metales preciosos, en el banco danés estiman que el oro y la plata se beneficiarán del descenso de los rendimientos reales y de los costes de financiación.
Tras un comportamiento sorprendentemente sólido en 2023, prevén nuevas subidas de precios en 2024, "impulsadas por los fondos de cobertura que persiguen el impulso, bancos centrales que siguen comprando lingotes a un ritmo récord y una demanda renovada de inversores en ETFs". apunta Ole Hansen, jefe de estrategia de materias primas.
En este sentido, ve que el oro podría alcanzar un nuevo máximo histórico en 2.300 dólares, apoyado potencialmente por un dólar más débil. Mientras que la plata podría encontrar apoyo adicional en el esperado repunte del cobre y desafiar el máximo de 2021 en 30 dólares.
Por último, en Saxo Bank ponen el foco en China. Y es que, para Redmond Wong, estratega jefe del gigante asiático, "navegar actualmente por el panorama macroeconómico implica cierto grado de incertidumbre". Este experto aboga por "sembrar semillas en tierra fértil".
En primer lugar, comenta que la mejora de la productividad y la autosuficiencia tecnológica seguirán siendo los dos temas estructurales de la estrategia de desarrollo a largo plazo de China.
"La seguridad energética, la transformación verde y la seguridad alimentaria son temas duraderos que seguirán recibiendo apoyo político. Empresas como CNOOC, PetroChina, Zijin Mining y Ganfeng Lithium se alinean con estos temas", agrega Wong.
Asimismo, aprecia que pueden surgir oportunidades en las acciones de Internet y en consumo discrecional. "Esta opción es para los traders más ágiles que tienen una visión del impulso de la recuperación cíclica de la economía china", concluyen en Saxo Bank.