Desde su anterior estimación de 90 dólares por barril
Los analistas de Goldman Sachs han elevado 5 dólares su previsión para el precio del petróleo Brent a finales de 2023, hasta 95 dólares por barril, después del inesperado recorte de producción anunciado este domingo por la OPEP+.
Los expertos del banco americano también han elevado 3 dólares su previsión para el precio en 2024, hasta 100 dólares por barril.
"La OPEP+ tiene un poder de fijación de precios muy significativo en relación con el pasado, y el recorte sorpresa es coherente con su nueva doctrina de actuar de forma preventiva, porque pueden hacerlo sin pérdidas significativas en la cuota de mercado", han explicado los expertos de Goldman.
Además, asumen que "los recortes de Rusia se extenderían hasta el segundo semestre de 2023", por lo que han reducido su pronóstico de producción para la OPEP+ para fines de 2023 en 1,1 millones de barriles diarios (mb/d)".
"Esta decisión choca con las expectativas del mercado, que estaba esperando que los países productores mantuviesen un tono duro, pero sin decidir aún nuevos recortes de la oferta, a la espera de ver si el precio del crudo recuperaba niveles con los que se sintiesen cómodos (80 dólares por barril como suelo)", explican los expertos de Renta 4.
"La decisión se toma tras las recientes caídas a mínimos de más de un año a raíz del empeoramiento de expectativas cíclicas ante la inestabilidad financiera y su potencial impacto en crédito y por derivada en la actividad económica", añaden.
En su opinión, "supone un nuevo riesgo al alza sobre la inflación (y por tanto presión adicional sobre los bancos centrales) y a la baja sobre el crecimiento".
En la misma línea, los expertos de Link Gestión comentan que "la medida muestra cómo la OPEP y sus aliados en la OPEP+, encabezados por Rusia, han recuperado 'el control' del mercado del petróleo mundial y la capacidad para determinar el precio de esta materia prima".
Sobre la inflación, añaden que "un repunte de los precios de la energía puede complicar la ya de por sí difícil tarea a la que se enfrentan los bancos centrales en su lucha contra esta variable".
A nivel geopolítico, la decisión de la OPEP vuelve a poner de nuevo de manifiesto la cada vez más estrecha relación entre Arabia Saudí y Rusia, pese a las presiones de Estados Unidos.
Neil Wilson, analista de Markets.com, comenta que "los saudíes no temen a EEUU. Estamos viendo una refundición de la dinámica regional y global a la luz del Covid y las tensiones entre EEUU y China", con el telón de fondo de la guerra en Ucrania.
"Asistimos a nueva era, como lo demuestra el acuerdo entre Arabia Saudí e Irán negociado por China. Los saudíes están haciendo lo que tienen que hacer y la Casa Blanca ha perdido su influencia, al parecer", añade este experto.