El banco central ha realizado dos subastas de 75.000 millones de dólares
La Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) ha tenido que inyectar liquidez en el mercado monetario estadounidense por segunda jornada consecutiva debido a las tensiones financieras registradas esta semana, que en la madrugada del lunes dispararon los tipos de interés en el mercado interbancario hasta niveles récord del 10%.
El coste de pedir prestado efectivo a través de acuerdos de recompra 'overnight' (revierten de la noche a la mañana), conocidos como repos, aumentó el martes hasta el 10%. Esta tasa de interés, conocida como 'depo rate', está reflejando una fuerte tensión financiera en el mercado monetario americano, que a su vez está complicando la financiación empresarial a corto plazo.
La Fed de Nueva York ha realizado este miércoles la segunda subasta consecutiva por valor de 75.000 millones de dólares en la que acepta bonos del Tesoro y otros valores hipotecarios como garantía y, a cambio, proporciona efectivo. "El Banco de la Reserva Federal de Nueva York llevará a cabo una operación de acuerdo de recompra (repo) para ayudar a mantener la tasa de fondos federales dentro del rango objetivo del 2% - 2,25%", ha explicado el organismo, que no obstante no ha dado detalles sobre el súbito repunte registrado este lunes.
"Esta operación de 'repo' se llevará a cabo con los distribuidores principales por un monto total de 75.000 millones de dólares. Los valores elegibles como garantía incluyen bonos del Tesoro, deuda y valores respaldados por hipotecas. Las propuestas se otorgarán en función de su atractivo en relación con una tasa de referencia para cada tipo de garantía, y están sujetas a una tasa de oferta mínima del 2,10%", ha añadido la Fed de Nueva York.
El objetivo de estas operaciones es volver a situar la 'depo rate' en el rango de los tipos de interés oficiales. Y pese a que el interés se ha calmado hasta el 2,43% este miércoles desde el 10% registrado el martes, todavía está por encima del 2,2% de las últimas semanas.
Según Financial Times, los bancos han solicitado 80.000 millones de dólares, por encima de los 75.000 ofrecidos por la Fed y de los 53.000 millones que solicitaron el martes. Se trata de la primera inyección que realiza el banco central en el mercado monetario americano desde la gran crisis financiera de 2008.
Jim Reid, estratega de Deutsche Bank, comenta que "hay varias opiniones sobre la causa de este fenómeno, como un desajuste de las empresas por los pagos de impuestos en efectivo, restricciones regulatorias, solicitudes hinchadas de los traders o ventas masivas en el mercado de bonos".
No obstante, este experto señala que "seguimos confundidos sobre la verdadera causa" y añade que "independientemente de lo que haya creado las tensiones, no ha pasado desapercibido que hemos tenido dos grandes movimientos en diferentes clases de activos esta semana (en referencia al petróleo), además de la liquidación de los bonos en las dos semanas anteriores"