Descuentan que tanto la Cámara de Representantes como el Senado aprobarán el acuerdo
Por fin demócratas y republicanos han alcanzado un acuerdo sobre el techo de la deuda en EEUU. Tras semanas de arduas negociaciones, y con las advertencias de la secretaria del Tesoro, Janet Yellen, sobre la fecha límite en la que el país se quedaría sin dinero y podría entrar en 'default' presionando a ambos bandos, han logrado acercar posturas y han acordado una serie de medidas que evitarán el impago de Estados Unidos. Esto, según los expertos, traerá un 'rally de alivio' a las bolsas.
"El hecho de que hoy tanto Wall Street como la bolsa londinense se mantengan cerrados por la celebración de festividades locales hará que los volúmenes de contratación sean muy reducidos, en línea con lo que viene ocurriendo en las últimas sesiones. Esperamos, sin embargo, que los inversores vuelvan a apostar por el riesgo, en lo que puede considerarse un pequeño 'rally de alivio', que comenzó el viernes, al ser ya muy poco probable que EEUU entre en default", apuntan los analistas de Link Secutities en su comentario diario de mercados.
Y en la misma línea se expresa Stephen Innes, socio director de SPI Asset Management. "Los mercados han rebotado al alza tras conocerse que se ha alcanzado un acuerdo provisional sobre el límite de deuda durante el fin de semana. Provisional en el sentido de que se espera que el proyecto de ley sea sometido a votación por un Congreso bipartidista y tímido a finales de esta semana, y siempre hay una posibilidad, por pequeña que sea, de que los republicanos de línea dura puedan socavar los esfuerzos de McCarthy", comenta sobre el acuerdo alcanzado por el presidente de la Cámara de representantes, Kevin McCarthy, y el presidente de EEUU, Joe Biden.
En su opinión, "cabe esperar un leve repunte de alivio en caso de resolución, ya que los inversores discrecionales vuelven a centrarse en la miríada de preocupaciones que les han mantenido firmemente en el bando bajista durante más de un año, especialmente con el discurso de la Reserva Federal y los datos económicos de EEUU, cada vez más halagüeños".
En Link también creen que aunque el acuerdo debe ser aún ratificado por las dos cámaras del Congreso de EEUU, "a pesar de la oposición de las alas más radicales de los partidos republicano y demócrata" se lograrán "tanto en la Casa de Representantes, controlada por los republicanos, como en el Senado, donde los demócratas tienen mayoría, las mayorías necesarias para que la ley llegue al presidente Biden a finales de esta semana para ser ratificada".
Cabe recordar que este fin de semana Yellen ha retrasado del 1 de junio al 5 del mismo mes el conocido como día 'X', a partir del cuál EEUU no podrá hacer frente a sus compromisos de pago, lo que según los expertos de Link "da un mayor margen de maniobra a las dos cámaras para la tramitación de la ley".
"Con este espinoso tema en vías de solución, a partir de ahora los inversores volverán a centrar su atención tanto en la macroeconomía como en los fundamentales que presentan las distintas compañías cotizadas, al menos así esperamos que sea", dicen.
Y, sobre todo, en la Reserva Federal (Fed), que está viendo que la inflación no baja al ritmo que le gustaría, por lo que se abre la posibilidad de que el banco central estadounidense vuelva a subir los tipos de interés en la reunión de su Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) de junio. Hasta ahora se pensaba que ya había concluido con las alzas.
DEBERÍA CONTAR CON EL APOYO SUFICIENTE
Por su parte, los estrategas de Rabobank reconocen que aunque el acuerdo no es "en absoluto un hecho consumado", creen que "debería contar con el apoyo suficiente tanto de republicanos como de demócratas para aprobarlo antes de la fecha 'X' revisada por Janet Yellen, el próximo lunes".
Parece que el proyecto de ley se presentará en el Congreso el miércoles, con la esperanza de una rápida aprobación tanto en la Cámara de Representantes como en el Senado. "Ninguna de las partes está satisfecha con los términos del acuerdo, lo que probablemente sugiere que alcanza el equilibrio adecuado", opinan los analistas del banco holandés.
Destacan que el techo de la deuda se suspenderá durante dos años, "tiempo suficiente para que Biden llegue a las elecciones presidenciales de 2024", y que los republicanos han conseguido de Biden concesiones en materia de gasto que limitan el crecimiento del gasto no esencial al 0% en el año fiscal 2024 y sólo al 1% en el año fiscal 2025.
"Esto representa un recorte en términos reales, pero no ha sido suficiente para algunos de los halcones fiscales del Partido Republicano, que han señalado que, con este acuerdo, la deuda nacional alcanzará los 35 billones de dólares en 2025", apuntan. Asimismo, remarcan que a los demócratas progresistas "les molesta que Biden haya aceptado recortar el gasto".
Como dicen en Rabobank, "si hubiera que reducir el déficit, esos miembros estarían a favor de aumentar los impuestos como medio para hacerlo". No obstante, estos expertos creen que "se ha vuelto a dar una patada a la lata de la deuda y que la represión financiera sigue siendo la única estrategia real de reducción de la deuda que tiene alguna perspectiva de funcionar realmente". Algo que, en cualquier caso, "requeriría la ayuda de nuestros amigos de la Reserva Federal".
En cualquier caso, en la entidad holandesa creen que pese al acuerdo, "se avecina otra semana de argucias sobre el techo de deuda, pero al menos nos acercamos a su fin (por ahora)". Y es que ahora se plantean muchas preguntas nuevas: ¿Se desarrollará sin problemas la tramitación del acuerdo en el Congreso o habrá intentos de echar a perder el acuerdo en el último minuto? ¿Qué significa la reducción del impulso fiscal para la liquidez del dólar y los mercados emergentes? ¿Y da el acuerdo sobre la deuda a la Reserva Federal vía libre para un mayor endurecimiento? Todo esto se resolverá, previsiblemente, esta semana.