MADRID, 25 (EUROPA PRESS)
El comité de expertos del Banco de España encargado de realizar una evaluación externa de la supervisión de conducta de entidades financieras ha recomendado que la institución refuerce su régimen disciplinario, según ha informado el propio Banco de España este lunes.
El comité de expertos realizó su evaluación entre noviembre de 2023 y mayo de 2024. Está conformado por Stefan Ingves (exgobernador del Banco de Suecia, presidente del Centro de Toronto y académico de Swedish House of Finance, un centro adscrito a la Escuela de Negocios de Estocolmo), Hanzo van Beusekom (miembro del consejo de la Autoridad para los Mercados Financieros de Países Bajos, así como miembro de Iosco y miembro alterno de ESMA) y Pedro Duarte Neves (asesor del consejo del Banco de Portugal y exsubgobernador entre 2006 y 2017, así como exvicepresidente de la EBA).
"Nuestra recomendación es que el Banco explore oportunidades para fortalecer el régimen disciplinario formal dentro del marco legal actual y, cuando sea apropiado, instar a cambios legales para facilitar las medidas punitivas en la supervisión de conducta", recoge el informe elaborado por los tres 'sabios'.
En concreto, los expertos consideran que el número de medidas punitivas dirigidas contra las entidades supervisadas "parece relativamente bajo". No obstante, han recordado que no esto no significa que el régimen disciplinario sea poco efectivo, sino que puede que las entidades enderecen su conducta con medidas menos formales.
En todo caso, el informe recuerda que el incumplimiento estructural de la normativa tiene efectos negativos para los consumidores financieros, lo que debería provocar "medidas punitivas serias" o, incluso, la responsabilidad individual. "El marco legal actual no hace esto fácil para el Banco de España", ha indicado.
El plan de acción que ha elaborado Banco de España con arreglo a las recomendaciones de este informe recoge que, ante esta receta, el organismo preparará un análisis comparado del régimen sancionador aplicable en otras jurisdicciones del entorno.
Asimismo, los tres expertos consideran que los riesgos de conducta suelen ser a nivel general para todo el mercado, y no centrados en firmas específicas. "El panel recomienda rebalancear la valoración de riesgos, moviendo al centro los riesgos de mercado y relegando los riesgos específicos por institución a un segundo nivel", han explicado.
En esta línea, los expertos consideran que la definición de riesgos de Banco de España debía alejarse del no cumplimiento de reglas hacia una definición más flexible de potencial daño a los consumidores.
Ante esto, Banco de España ha indicado que recogerá plenamente esta recomendación y pondrá "el foco" en el posible daño a la clientela reforzando la perspectiva sectorial.
El supervisor español con sede en Cibeles también ha explicado que incorporará "nuevos indicadores" para la estimación del perfil de riesgo de las entidades, enriqueciendo los indicadores basados esencialmente en reclamaciones. Los expertos habían recomendando no centrarse tanto en las reclamaciones por ser una fuente de información "reactiva y ruidosa".
Otra gran receta de los expertos es usar otras herramientas supervisoras diferentes de las inspecciones tradicionales, en las que Banco de España pone mucho peso.
Banco de España ha indicado que, a futuro, incluirá entre las actuaciones supervisoras trasversales las singularmente destinadas a verificar el grado de cumplimiento de las expectativas supervisoras comunicadas. Estas serán complementadas con un enfoque "más centrado" de los trabajos de seguimiento de las entidades más significativas en reforzar el conocimiento de su cultura, gobernanza y control interno.
Como respuesta a las recomendaciones de la evaluación, el organismo dirigido por José Luis Escrivá también explorará el uso de herramientas tecnológicas novedosas en la supervisión de conducta.