Aseguran que si las siete cajas del SIP hubieran cargado las pérdidas contra resultados no hubieran sido "ni sólidas ni viables"
MADRID, 17 (EUROPA PRESS)
Los peritos judiciales del Banco de España Víctor Sánchez Nogueras y Antonio Busquets, responsables de los informes para el juez de instrucción de la Audiencia Nacional Fernando Andreu que provocaron la imputación del antiguo consejo de administración de Bankia presidido por Rodrigo Rato, han tachado de "anómala" la creación de BFA en diciembre de 2010 para asumir el papel que creían "debía" haber tenido Caja Madrid.
Así lo han indicado en la segunda parte del arranque de la fase pericial del juicio que se celebra en la Audiencia Nacional de San Fernando de Henares (Madrid) desde octubre del año pasado, asegurando que Caja Madrid debía haberse considerado como entidad adquiriente dado su tamaño por nivel de activos y porque buena parte del equipo directivo de BFA provenía de la caja madrileña.
"Nos encontramos con esta anomalía: Se constituye una entidad, que es BFA, como adquiriente. Lo evidente es que la adquiriente debe ser una empresa preexistente, donde la de mayor tamaño impone su equipo directivo", han precisado.
Tal y como han explicado ante la sección cuarta de la sala de lo penal, a Caja Madrid no se le designó como entidad adquiriente porque esto le permitía poder contabilizar ajustes a valor razonable con cargo a reservas, ya que la que se constituía como matriz no podía realizar estos cambios en su activo.
No obstante, han subrayado que los balances de una sociedad recién adquirida "no se tocan a no ser que haya habido un evidente deterioro que afecta a la inversión crediticia o a la participada". En este caso, sí que se realizaría un ajuste, pero en cualquier circunstancia debía haberse dotado contra la cuenta de resultados.
"No es indiferente cargar las pérdidas contra resultados que contra reservas. ¿Cómo va a ser esto neutro?", han criticado los peritos judiciales, al tiempo que han recordado que el argumento que se dio para 'tocar' los balances individuales eran "razones supervisoras".
"En mis 20 años de experiencia nunca he leído en nuestra normativa el término de 'razón supervisora'. Lo que sí sé es que los balances individuales de las cajas tenían pérdidas que debían haberse dotado contra resultados", ha señalado Sánchez Nogueras.
El experto ha subrayado que en caso de que se hubiera hecho ajustándose a la normativa habrían aflorado "millones y millones de euros en pérdidas". "Esas pérdidas, sin embargo, afloraron después", ha apostillado. "Si se hubieran cargado en la cuenta de resultados, ninguna de las siete cajas del SIP hubieran sido fundamentalmente sólidas o viables", ha zanjado Busquets.
LOS PERITOS DE LAS PARTES NIEGAN IRREGULARIDADES
Mientras Sánchez Nogueras y Busquets respondían a las preguntas de la fiscal Carmen Launa, el resto de peritos propuestos por las partes han intervenido para "matizar las rotundas afirmaciones" que estaban realizando los judiciales.
Leandro Cañibano, Germán López Espinosa y Rubén Manso, de BFA-Bankia, han defendido la creación de BFA, indicando que se estableció bajo las normas financieras españolas e internacionales. "En una combinación de negocios mediante un contrato se puede crear un ente superior y que las entidades se conviertan en participadas", han precisado.
"Es evidente que la participación de Caja Madrid debía ser mayor, pero digamos que la legalidad de tomar esta iniciativa es clara. Es una forma que convencía más a todos que el hecho de que la mayor absorbiera al resto", han remarcado.
Manuel García Ayuso, de Deloitte, también ha remarcado que todos los SIPs que se conocen se conformaron con la creación de una entidad central o dando el control a otra entidad que no era ninguna de las participadas, como en el caso de Banca Cívica.
Respecto al cargo contra reservas, los peritos propuestos por Bankia han subrayado que este ajuste se permitió por parte del Banco de España en todos los SIPs. "Habéis confundido las normas en varios momentos", ha reprochado Manso a los judiciales.