MADRID, 15 (EUROPA PRESS)
La ministra de Economía y Empresa, Nadia Calviño, ha resaltado el papel de los mercados de capitales como instrumento de diversificación de las fuentes de financiación y para no depender exclusivamente de la bancaria, cuyo riesgos se han evidenciado durante la crisis financiera, según ha señalado durante su intervención en el Foro Latibex celebrado este jueves en la Bolsa de Madrid.
En su opinión, la agenda reformista del Gobierno debe acompañarse de una profundización de la integración económica y financiera en el ámbito comunitario, con una vocación atlántica y europea.
"Estamos impulsando la Unión Bancaria y espero que de aquí a diciembre haya un progreso decidido en la creación de instrumentos en este ámbito y en avanzar en la culminación del mercado de capitales, un proyecto absolutamente fundamental si queremos tener fuentes de financiación alternativas a la banca, que es imprescindible para la financiación de empresas y familias pero que tiene que ser complementada con mercados de capitales eficientes y profundos", ha apostillado la ministra.
Calviño ha destacado los lazos históricos, sociales y políticos que unen a España con Latinoamérica y la importancia "definitiva" que ha tenido para la economía española la inversión directa en la región latina en sectores como el bancario, el energético, el de las telecomunicaciones y el de las infraestructuras y que ha puesto de relieve la confianza e importancia de las relaciones bilaterales.
"Estos focos de inversión han sido mutuamente beneficiosos, la inversión de América Latina en España se ha triplicado en los últimos años y es fundamental seguir profundizando en estas relaciones bilaterales para hacer frente a las fuentes de incertidumbre que se erigen a nuestro alrededor", ha señalado Calviño, quien se ha referido a las políticas proteccionistas, los precios del petróleo y los riesgos geopolíticos.
La ministra ha reiterado su previsión de crecimiento de la economía española del 2,6% este año y del 2,3% en 2019 y ha resaltado que es necesario un entorno político, financiero y social "estable" para contar con un entorno favorable de inversión y un crecimiento económico sostenible.
En esta línea, ha apuntado que la política económica del Gobierno se centra en la disciplina fiscal, la inversión en cohesión social y una agenda reformista, lo que debe acompañarse de una profundización de la integración económica y financiera en el ámbito comunitario.
En concreto, Calviño ha defendido que las cuentas públicas españolas necesitan un ajuste estructural para reducir la deuda de forma sostenida en los próximos años y una disciplina fiscal que permita abordar las inversiones necesarias en educación, innovación o I+D.
Asimismo, ha asegurado que el aumento de la desigualdad en España uno de los desequilibrios más importantes a los que el país debe hacer frente, por lo que el Ejecutivo ha decidido profundizar en políticas de apoyo a la familia y de cohesión social e incidir en una agenda de reformas necesaria para poner las bases a "un crecimiento sostenido a medio y largo plazo".