Los inversores se lanzan a comprar dólares para mantenerse 'a salvo'
El mercado de las divisas está viviendo un verano de todo menos tranquilo. Nadie se esperaba que la operativa de las monedas fuese a echar tanto humo, pero no hay día en el que no sorprenda. Y este viernes no iba a ser para menos. La crisis que atraviesa Turquía se está dejando notar con fuerza en la lira, que no deja de caer, pero también ha contagiado a otras como el euro y las divisas emergentes.
El temor a un contagio de la crisis turca, que mantiene un duro enfrentamiento diplomático con EEUU y cuya economía se enfrenta a graves problemas, se ha extendido entre los operadores del mercado de divisas. La lira está en caída libre por la pérdida de confianza de los inversores en la economía. De hecho, ya acumula una caída de casi el 40% desde principios de año.
Este viernes, el descenso se agrava, y la lira turca ha caído a mínimos históricos. Durante todo el día ha registrado importantes pérdidas frente al 'billete verde' y también en su cruce con la moneda comunitaria, y ha llegado a registrar pérdidas del 14% después de que el presidente de EEUU, Donald Trump, haya anunciado que va a duplicar los aranceles sobre el aluminio y el acero turcos. De nada ha servido la intervención del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, ni del ministro de Finanzas, Berat Albayrak, anunciando un nuevo plan económico para contener la caída de la lira y asegurando que Turquía "no perderá la guerra económica".
La divisa turca registra este viernes una de las mayores caídas en la historia del mercado de divisas. "La lira ha estado sometida a una fuerte presión este año, pero el movimiento de hoy es el más dramático que se ha visto hasta ahora", dicen los expertos de XTB, que señalan que "los inversores están cada vez más preocupados por la inminencia de una crisis monetaria total".
La lira turca toca nuevos mínimos históricos y ya acumula una caída de casi el 40% desde principios de año
La situación de la lira ha empeorado al ver los inversores que el presidente turco no tiene intención de cambiar la política monetaria del país. El Banco Central de la República de Turquía (CBRT) está fuertemente intervenido por el mandatario, que revalidó su mandato en las elecciones del pasado mes de junio. Erdogan se opone a elevar los tipos de interés para frenar la creciente inflación, y dado que parece improbable que vaya a cambiar de opinión pese a que el Gobierno turco ha prometido reforzar la economía, el mercado no se ha tomado demasiado bien todos estos acontecimientos. "Las crisis monetarias siempre implican algún grado de endurecimiento monetario, y cuanto más tiempo se resista a ello, mayores serán los riesgos", comentan los expertos de la entidad japonesa MUFG Bank.
No obstante, el problema se ha agravado en las últimas horas, y se ha producido un efecto contagio al tiempo que han aumentado las tensiones geopolítias en Turquía. La situación ya se deja sentir en otras monedas, y como dicen los expertos de XTB, "las turbulencias están empezando a atraer un nivel aún mayor de atención en los mercados financieros".
Este viernes el euro ha caído a su nivel más bajo en trece meses en su cruce contra el dólar, que ha despegado en los últimos días. Los recientes comentarios del Banco Central Europeo (BCE) sobre los riesgos que supone la guerra comercial para el crecimiento mundial también está pesando sobre el euro, y no se puede olvidar a Italia, que sigue siendo un obstáculo para la operativa de la moneda única ante las dudas que suscita la aprobación del nuevo presupuesto, dado que el Gobierno quiere implantar una política de mayor gasto.
Los inversores se han lanzado a comprar dólares, una moneda que está actuando como activo refugio ante el caos en el que se ha sumido el mercado de divisas. "El dólar está bien cotizado en todos los mercados, alcanzando nuevos máximos frente a sus principales pares, sobre todo la lira turca", destaca Neil Wilson, analista de Markets.com. "La turca es una economía en problemas y los inversores simplemente están huyendo", añade.
Pero la fortaleza del dólar no sólo se explica por estas tensiones geopolíticas. Las tensiones comerciales también están apuntalando a la divisa estadounidense, y dado que el presidente Donald Trump no deja de abrir frentes (primero con China y puede que dentro de poco con Rusia), no parece probable que la fortaleza del dólar encuentre techo. Al menos por ahora.
OTRAS DIVISAS EMERGENTES, EN EL PUNTO DE MIRA
Además, el resto de divisas emergentes también están en el punto de mira, y es que son las que más pueden verse afectadas por la situación de la lira. De momento, el rublo ruso es el más perjudicado al haber tocado su mínimo de dos años afectado, por un lado, por las dudas que se ciernes sobre el mercado de divisas, y por otro por la decisión de EEUU de sancionar a Rusia por el ataque del 4 de marzo contra un exagente doble en el Reino Unido. Y la tensión para el rublo se ha incrementado ante la respuesta de Rusia a las sanciones: ha asegurado que si fuera necesario reaccionará esta guerra económica "por otros medios". Los expertos no descartan una nueva guerra comercial entre los dos países.