El Ibex termina el mes con caídas del 1,4% y sube un 15,5% en 2023
Un agosto malo para la renta variable que al final no lo ha sido tanto. Las bolsas han salvado un mes, dominado en su primera mitad por las caídas, con unos recortes que pueden considerarse 'contenidos'. El Ibex 35 ha perdido finalmente un 1,4%, mientras que el Dax se ha dejado un 3% y el Cac, un 2,4%. En EEUU, los descensos han sido del 2,3% para el Dow Jones, del 1,7% para el S&P 500 y del 2,1% para el Nasdaq Composite.
Teniendo en cuenta el cierre de agosto, en el conjunto del año el Ibex 35 mantiene fuertes alzas del 15,5%, mientras que el Dax avanza un 14,5% y el Cac, un 13%. En EEUU, el Nasdaq sigue siendo líder indiscutible, con alzas del 34%, el Dow Jones sube un 4,7% en 2023 y el S&P, un 17,4%.
En cuanto a otros activos, destaca la fortaleza del dólar en el mes, un petróleo plano y los bonos y el bitcoin más bajos.
La conclusión de este mes, por tanto, es que no ha sido tan malo como se anticipaba. La pregunta ahora es si la debilidad que se ha observado a lo largo del mismo se extenderá a lo que queda de año o si las bolsas retomarán la fortaleza. Hay voces optimistas -Bankinter ha aumentado su exposición a la renta variable aprovechando las caídas y espera subidas de cara final de año porque "se mantienen los buenos fundamentales"-, pero, hoy por hoy, predomina más la cautela, ya que faltan certezas y sobran incertidumbres.
El contexto actual en las bolsas está marcado por dos factores fundamentales: China y las próximas decisiones de los bancos centrales, con riesgo de recesión aparejado.
Sobre China sobrevuelan muchos interrogantes que llevan a los analistas a dudar de que, de cara a los meses que le quedan a este año, puede convertirse en un catalizador fiable para la renta variable. En cuanto a los bancos centrales, ahora más que nunca se va dato a dato, y eso está incrementando la volatilidad bursátil. Cada vez que sale un dato malo (como ha ocurrido esta semana en EEUU), los índices suben ante la esperanza de que la Reserva Federal (Fed) no suba tipos en septiembre, y cuando sale uno bueno, ocurre lo contrario. El 'bad news is goods news' ('malas noticias son buenas noticias') está más vigente que nunca.
Por supuesto, la mira sigue puesta en la inflación, y los IPC de esta semana en Europa han dejado la sensación de que las posibilidades de un alza de tipos en septiembre por parte del Banco Central Europeo (BCE) están ahí. El IPC de la eurozona de agosto, para el que se esperaba una moderación al 5,1% desde el 5,3%, se ha mantenido sin cambios. Eso sí, la tasa subyacente se moderó hasta el 5,3% desde el 5,5%, en línea con lo previsto.
"La inflación sigue siendo la cifra más importante en los mercados", reconoce Ben Laidler, estratega de mercados globales de la plataforma de inversión en multiactivos eToro. Las reuniones del BCE del 14 de septiembre y de la Fed, del 20 de septiembre, constituyen, sin duda, los principales catalizadores para las bolsas en este mes. Tampoco olvidamos la del Bando de Inglaterra del 21 de septiembre.
En el capítulo de resultados empresariales, los beneficios del segundo trimestre del S&P 500 han caído un 3%, con un 80% de valores y todos los sectores superando las previsiones. Los beneficios del Stoxx 600 cayeron un 5%. El líder de los 'siete magníficos', Nvidia, volvió a superar las elevadas expectativas de ventas en un 30%. "Los bancos se vieron afectados por los recortes de calificación, las nuevas normas de capital y el impuesto inesperado de Italia", explica Laidler.
El comportamiento de las bolsas en agosto es "revelador", según este experto, ya que han mostrado una resistencia importante pese a las incertidumbres. Además de China y de la persistencia de un mensaje duro de los banqueros centrales (véase el último encuentro en Jackson Hole), han presionado también otros factores, como la subida de los rendimientos de la renta fija y los precios del petróleo.
Desde eToro consideran probable que parte del débil temor estacional de septiembre se haya anticipado en las bolsas, y siguen siendo positivos con la inflación a la baja y los tipos de interés en su punto álgido, los beneficios en mínimos y las valoraciones respaldadas. "Nos centramos en el crecimiento defensivo y de larga duración, desde la tecnología y los bonos hasta los criptoactivos, al tiempo que mantenemos la cautela respecto a los productos cíclicos que atrapan valor, las pequeñas capitalizaciones y las materias primas, ante la inminente ralentización", comentan.
En este sentido, destacan como relevante el hecho de que, de cara a este nuevo mes, el riesgo de fenómenos atmosféricos es alto, con la formación de El Niño y la temporada alta de huracanes, manteniendo en vilo a las materias primas. "Los inversores también estarán atentos a las últimas maniobras presupuestarias del Gobierno estadounidense, que centrarán la atención de los mercados de renta fija, y al goteo de estímulos en China, que constituye una preocupación mundial. El plato fuerte corporativo es el lanzamiento clave del iPhone 15 de Apple y las próximas OPV de ARM, Birkenstock e Instacart, una prueba para la recuperación del mercado de OPV, antes del inicio de la temporada de resultados del tercer trimestre el 13 de octubre", concluye Laidler.