"Si se produce un referéndum de independencia, no será por la mala fe del gobierno escocés, sino por la intransigencia del gobierno británico", escribe en el 'Times'
La “Intransigencia pura” del gobierno británico de Theresa May en las negociaciones sobre el Brexit puede conducir a Escocia a un segundo referéndum. Así de contundente se ha manifestado la primera ministra de Escocia, Nicola Sturgeon, acerca de las conversaciones entre las dos líderes de la posible convocatoria de una segunda votación sobre la independencia del país, que sería llevado al Parlamento escocés tan pronto como Reino Unido invoque el artículo 50 del Tratado de Lisboa, según varios medios.
En un artículo publicado en el 'Times', Sturgeon ha avisado a May de que se está quedando sin tiempo para cambiar el curso de los acontecimientos, a la vez que ha defendido que la votación sobre el abandono de la Unión Europea (UE) ha cambiado el panorama en Escocia desde que celebró el primer referéndum sobre la independencia en 2014. En aquella ocasión se perdió por un margen de 10 puntos a favor de los unionistas, con lo que no se produjo la secesión de Escocia, pero las cosas ahora serían diferentes a causa del proceso de divorcio con la UE -defiende Sturgeon-. Mientras que los votantes de Inglaterra y Gales apoyaron fuertemente el abandono de ‘los Veintiocho’ en el referéndum del pasado junio, los escoceses se mostraron abrumadoramente a favor de permanecer dentro del bloque.
Sturgeon: "Si se produce un referéndum de independencia, no será por la mala fe del gobierno escocés, sino por la intransigencia del gobierno británico”
"Si se produce un referéndum de independencia, no será por la mala fe del gobierno escocés, sino por la intransigencia del gobierno británico", ha expresado Sturgeon. "No es demasiado tarde para que el gobierno del Reino Unido cambie de rumbo, pero el tiempo se está agotando”, ha avisado.
CELEBRACIÓN DE UN SEGUNDO REFERÉNDUM
La especulación acerca de que Sturgeon pueda impulsar un nuevo referéndum se ha incrementado en los últimos días se ha ido incrementado. De hecho, el mismo Times publicó este fin de semana una noticia, sobre las supuestas conversaciones entre la primera ministra británica, Theresa May, y su homóloga escocesa, Nicola Sturgeon, que estarían preparando un nuevo referéndum sobre la independencia de Escocia.
Podría ser convocado tan pronto como May invoque el artículo 50 del Tratado de Lisboa. Sin embargo el referéndum no se celebraría hasta que no se produjera la salida definitiva, según algunos expertos. Mientras tanto, Sturgeon promovería un votación en el parlamento escocés, después de la conferencia del SNP del próximo mes, sobre un segundo referéndum, con la que buscaría fortalecer su mandato, explica el rotativo británico.
La reacción en la divisa británica no hizo esperar y cayó presa de una oleada de ventas durante la sesión asiática de este lunes, hasta su peor precio desde el 13 de febrero, desde donde se recupera hasta un máximo este martes en los 1,2450 dólares. En su cruce contra el euro, la moneda británica ha cedido algo más de un 0,4%, hasta un cambio de 0,8535 libras por cada euro (desde un precio máximo en la sesión en los 0,8495 libras), su peor cambio en una semana.
Expertos de Danske Bank consideran que es “muy probable” que se celebre el referéndum y “cuando se anuncie provocará más ventas en la libra, que se desplomará contra el euro”. Estos analistas también se reafirman en la idea de que la votación no se producirá hasta que Reino Unido abandone efectivamente la UE.