La medida todavía puede ser tumbada por el Consejo de la Unión Europea
El Parlamento Europeo ha aprobado este miércoles que las inversiones en plantas nucleares y en centrales de gas sean consideradas como inversiones “verdes”, tal y como propuso la Comisión Europea el pasado mes de febrero.
El Ejecutivo comunitario señalaba que veía necesarias este tipo de energías para consumar la transición hacia un modelo energético renovable y limpio, una clasificación que causó el rechazo entre sus expertos asesores y en países como España. Bruselas asumía que ni el gas ni la energía nuclear son energías neutras a nivel climático, ni tampoco renovables, pero defendió su papel para lograr el objetivo de una economía descarbonizada en 2050.
“Se trata de huir del carbón”, ha apuntado la comisaria de Servicios Financieros, Mairead McGuinness. “Las renovables ya están incluidas en la taxonomía, ahora establecemos en qué medida el gas y la nuclear pueden contribuir, con límites, a la transición, con límites de emisiones, queremos incentivar el cambio”, ha agregado, “Son los Estados miembros los que deben elegir su mix energético”.
Finalmente, con 278 votos a favor, 238 en contra y 33 abstenciones, la Eurocámara ha decidido validar la postura de la Comisión Europea. La pelota está ahora en el tejado del Consejo de la Unión Europea, el otro órgano que ejerce la función legislativa y presupuestaria de la UE, que puede tumbar la propuesta comunitaria. Para ello, deberán oponerse el 72% de los países (20 de 27) antes de la medianoche del 11 de julio y estos deben representar, al menos, al 65% de la población comunitaria (unos 290 millones de personas).