Tendrá que dar cuenta de sus reuniones con el embajador ruso
El Congreso de EEUU está investigando si el Gobierno ruso influyó en las elecciones
El marido de Ivanka Trump y asesor del presidente de EEUU, Jared Kushner, tendrá que comparecer en el Senado para hablar de la supuesta injerencia del Gobierno ruso en las pasadas elecciones, en las que el republicano Donald Trump ganó a la demócrata Hillary Clinton. El Congreso estadounidense está investigando si el Kremlin influyó en los comicios, y quiere que Kushner explique sus reuniones con el embajador ruso.
La comparecencia del yerno de Trump marcaría una nueva fase en las investigaciones que lleva a cabo el Congreso
La comparecencia del yerno de Trump marcaría una nueva fase en las investigaciones que lleva a cabo el Congreso para saber si el Gobierno ruso influyó en las elecciones, conocido como 'Rusiagate', y si se coordinó con la campaña del nuevo presidente de Estados Unidos. Según recoge Efe, que se hace eco de una información de la cadena de televisión ABC, Kushner planea testificar a finales de junio o a principios de julio ante el Comité de Inteligencia del Senado, uno de los encargados de la investigación rusa.
La cadena, que cita a fuentes familiarizadas con la investigación, ha informado de que la comparecencia de Kushner se celebrará a puerta cerrada, aunque todavía no se ha fijado una fecha concreta para la misma. El yerno de Trump y uno de sus asesores más cercanos deberá entregar documentos y luego volver al Congreso para responder a las preguntas de los senadores.
Esta comparecencia marcaría una nueva fase en las investigaciones que llevan cabo el Congreso y el Buró Federal de Investigaciones (FBI) para averiguar si el Gobierno ruso influyó o no en las elecciones del año pasado y si se coordinó con la campaña de Trump. Y es que el FBI ha puesto el ojo en Kushner por sus reuniones con el embajador ruso en EEUU, Serguei Kislyak, y con el banquero Serguei Gorkov, consejero delegado del banco nacional ruso Vnesheconombank y graduado de la academia de los servicios secretos rusos.
Unos encuentros que se produjeron, supuestamente, en medio de la campaña presidencial y en el periodo de transición desde las elecciones hasta el momento de la toma de posesión de Trump como nuevo presidente, cuando sustituyó en la Casa Blanca a Barack Obama.
REUNIONES RUTINARIAS
Hay que recordar que la Casa Blanca calificó de rutinarias las reuniones que Kushner mantuvo con Kislyak y Gorkov durante el periodo de transición. Sin embargo, el 26 de mayo, el diario The Washington Post reveló que Kushner pidió en diciembre al embajador ruso en EEUU que se estableciera un canal de comunicación secreto entre la campaña de Trump y el Kremlin durante el periodo de transición, para poder hablar sin la vigilancia de la inteligencia estadounidense. Esa última revelación ha generado un gran revuelo debido a la cercanía de Trump con Kushner.