Para "proteger a los estadounidenses de las prácticas comerciales desleales de China"
Dicho y hecho. El Gobierno de Joe Biden ha dado un golpe sobre la mesa y ha confirmado este martes que ha decidido aumentar los aranceles a las importaciones de productos de China por un valor de 18.000 millones de dólares. Según ha explicado la Casa Blanca en un comunicado, se verán afectados coches eléctricos, semiconductores, paneles solares, baterías de litio, grúas portuarias y productos médicos que vengan del gigante asiático.
"Biden toma medidas para proteger a los trabajadores y empresas estadounidenses de las prácticas comerciales injustas de China", reza la nota, que insiste en que el plan económico del demócrata "respalda las inversiones y crea buenos empleos en sectores clave que son vitales para el futuro económico y la seguridad nacional de Estados Unidos".
Además, señala que las "prácticas comerciales desleales de China en materia de transferencia de tecnología, propiedad intelectual e innovación están amenazando a las empresas y trabajadores estadounidenses", por lo que EEUU ha decidido tomar cartas en el asunto.
Y es que China "también está inundando los mercados globales con exportaciones a precios artificialmente bajos" que, en última instancia, están afectando a la economía estadounidense, afirma la Casa Blanca. Por ello, "en respuesta a las prácticas comerciales injustas de China y para contrarrestar los daños resultantes", Biden ha ordenado aumentar los aranceles sobre 18.000 millones de dólares en importaciones procedentes de China.
Como dice Biden, "los trabajadores y las empresas estadounidenses pueden superar a cualquiera, siempre que exista una competencia justa", pero durante "demasiado tiempo" China "ha utilizado prácticas injustas y ajenas al mercado", remarca. En concreto, denuncia que "las transferencias forzadas de tecnología y el robo de propiedad intelectual" por parte del gigante asiático ha contribuido a que "controle el 90% de la producción mundial de los insumos críticos necesarios para nuestras tecnologías, infraestructura, energía y atención médica, creando riesgos inaceptables para las cadenas de suministro de Estados Unidos y seguridad económica".
Además, añade la Casa Blanca, estas mismas políticas y prácticas no de mercado "contribuyen al creciente exceso de capacidad y a los aumentos repentinos de las exportaciones de China que amenazan con dañar significativamente a los trabajadores, las empresas y las comunidades estadounidenses".
De ahí el paso que ha dado Biden, que pretende proteger a sectores estratégicos en los que ahora mismo EEUU "está realizando inversiones históricas" para crear y mantener empleos bien remunerados. "Continuaremos trabajando con nuestros socios en todo el mundo para fortalecer la cooperación y abordar las preocupaciones compartidas sobre las prácticas desleales de China, en lugar de socavar nuestras alianzas o aplicar aranceles indiscriminados del 10% que aumentan los precios de todas las importaciones de todos los países, independientemente de si están comprometidos o no contra el comercio desleal", ha insistido.
Con el objetivo de "alentar a China a eliminar sus prácticas comerciales desleales", la administración Biden ha decidido imponer más aranceles sobre "sectores estratégicos" como el acero y el aluminio, los semiconductores, los vehículos eléctricos, las baterías, los minerales críticos, las placas solares, las grúas portuarias y los productos médicos. Así quedan ahora:
Coches eléctricos
El tipo arancelario aplicado a los vehículos eléctricos procedentes de China aumentará del 25% al 100% en 2024. "Con amplios subsidios y prácticas no comerciales que generan riesgos sustanciales de exceso de capacidad, las exportaciones chinas de vehículos eléctricos crecieron un 70% entre 2022 y 2023, poniendo en peligro las inversiones productivas en otros lugares", explica la Casa Blanca.
Por eso ahora, remarca, una tasa arancelaria del 100% "protegerá a los fabricantes estadounidenses de las prácticas comerciales desleales de China" y ayudará a garantizar "el futuro de la industria automotriz" con coches "fabricados en Estados Unidos por trabajadores estadounidenses".
Semiconductores
En este caso, el tipo arancelario sobre los semiconductores aumentará del 25% al 50% para 2025. "Las políticas de China en el tradicional sector de semiconductores han llevado a una creciente participación de mercado y una rápida expansión de la capacidad que corre el riesgo de expulsar la inversión de las empresas impulsadas por el mercado".
La administración Biden afirma que durante los próximos tres a cinco años, se espera que China represente casi la mitad de toda la nueva capacidad que se pondrá en funcionamiento para fabricar ciertas obleas de semiconductores heredados, lo que provocaría una "dependencia excesiva" que volvería a afectar a los mercados como ocurrió durante la pandemia, con interrupciones en la cadena de suministro que provocaron aumentos de precios en una amplia variedad de productos, incluidos automóviles, electrodomésticos y dispositivos médicos.
Acero y aluminio
El tipo arancelario aplicado a determinados productos de acero y aluminio aumentará de entre el 0%-7,5% al 25% en 2024. "El acero es un sector vital para la economía estadounidense y las empresas estadounidenses están liderando el futuro del acero limpio", hasta el punto de que se han aprobado una serie de inversiones que "convertirán a EEUU en una de las primeras naciones del mundo en convertir hidrógeno limpio en acero limpio".
Y añade que los trabajadores estadounidenses "siguen enfrentándose a la competencia desleal del exceso de capacidad no comercial de China en acero y aluminio, que se encuentran entre los productos con mayor emisión de carbono del mundo". Según la nota, "las políticas y subsidios de China para sus industrias nacionales de acero y aluminio significan una economía estadounidense de alta calidad y bajas emisiones", pero lo cierto es que los productos "se ven socavados por alternativas chinas artificialmente de bajo precio producidas con mayores emisiones".
Baterías, componentes y minerales críticos
Según ha detallado la Casa Blanca, el tipo arancelario sobre las baterías de iones de litio para vehículos eléctricos aumentará del 7,5% al 25% en 2024, mientras que el tipo arancelario sobre las baterías de iones de litio que no son para vehículos eléctricos aumentará del 7,5% al 25% en 2026. Por su parte, el tipo arancelario sobre las piezas de baterías aumentará del 7,5% al 25% en 2024.
Y el tipo arancelario aplicado al grafito natural y los imanes permanentes aumentará de cero al 25% en 2026, mientras que el tipo arancelario para algunos otros minerales críticos aumentará de cero al 25% en 2024.
"La concentración de la capacidad de extracción y refinación de minerales críticos en China deja nuestras cadenas de suministro vulnerables y nuestros objetivos de seguridad nacional y energía limpia en riesgo", comenta el Gobierno estadounidense. De ahí la subida de aranceles.
Paneles solares
En este caso, el tipo arancelario sobre los paneles solares (montados o no en módulos) aumentará del 25% al 50% en 2024. "El aumento de aranceles protegerá contra el exceso de capacidad impulsado por las políticas de China que deprime los precios e inhibe el desarrollo de capacidad solar fuera de China", comenta el comunicado.
EEUU se queja de que el gigante asiático "ha utilizado prácticas desleales para dominar más del 80% o el 90% de ciertas partes de la cadena de suministro solar global y está tratando de mantener ese status quo". "Las políticas chinas y las prácticas no comerciales están inundando los mercados globales con módulos y paneles solares artificialmente baratos, socavando la inversión en la fabricación de energía solar fuera de China", concluye.
Grúas portuarias
El tipo arancelario aplicado a las grúas portuarias aumentará del 0% al 25% en 2024. "La administración continúa cumpliendo con el pueblo estadounidense al reconstruir la capacidad industrial de Estados Unidos para producir grúas portuarias con socios confiables", destaca la Casa Blanca, que apunta que la nueva tasa arancelaria "ayudará a proteger a los fabricantes de EEUU de las prácticas comerciales desleales de China que han llevado a una concentración excesiva en el mercado".
Y es que las grúas portuarias "son piezas esenciales de infraestructura que permiten el movimiento y flujo continuo de bienes críticos hacia, desde y dentro de los Estados Unidos", y el Gobierno "está tomando medidas para mitigar los riesgos que podrían alterar las cadenas de suministro estadounidenses".
Productos médicos
Por último, los productos médicos como jeringas y agujas, cuyos tipos arancelarios aumentarán del 0% al 50% en 2024. Y para determinados equipos de protección personal (EPP), incluidos determinados respiradores y mascarillas, los tipos arancelarios aumentarán del 0%-7,5% al 25% en 2024, mientras que los aranceles sobre los guantes médicos y quirúrgicos de caucho aumentarán del 7,5% al 25% en 2026.
"Estos aumentos de tarifas ayudarán a respaldar y sostener una base industrial nacional sólida para suministros médicos que fueron esenciales para la respuesta a la pandemia de Covid-19 y que continúan utilizándose diariamente en todos los hospitales del país para brindar atención esencial", concluye.