"En cuanto a las sanciones financieras, no las apoyamos"
China ha confirmado que no se sumará a las sanciones económicas que EEUU y la Unión Europea (UE) han impuesto a Rusia tras la invasión de Ucrania. Así lo ha indicado Guo Shuqing, presidente de la Comisión Reguladora de Bancos y Seguros de China, en una rueda de prensa. "En cuanto a las sanciones financieras, no las apoyamos", ha afirmado.
"Todo el mundo está pendiente del reciente conflicto militar, o guerra, entre Rusia y Ucrania", pero "la posición de China ha sido expuesta claramente por el Ministerio de Asuntos Exteriores. Nuestras políticas internacionales son coherentes", ha remarcado el dirigente, según recoge CNBC. Ha señalando su particular oposición a las sanciones "unilaterales" impuestas al Kremlin, que según él no abordan eficazmente los problemas. "China no se sumará a ese tipo de sanciones", ha insistido.
Y es que, según recoge Europa Press, ha explicado que "desaprueba las sanciones financieras, particularmente las impuestas de forma unilateral, porque carecen de base legal suficiente y no tendrán efectos positivos".
Guo Shuqing, que es secretario del Partido Comunista Chino del Banco Popular de China, el banco central del país, ha dicho también este miércoles que espera que todas las partes mantengan intercambios económicos normales y que las sanciones no han tenido ningún impacto aparente en China hasta ahora.
"No creemos que estas sanciones vayan a tener un gran impacto en el futuro para China porque nuestra economía y nuestras finanzas son muy resilientes y estables", ha asegurado, aunque ha reconocido estar "muy preocupado" por la situación actual y todo lo que está ocurriendo. Y es que China es el mayor comprador de gas y petróleo ruso, y ha evitado condenar el ataque de Moscú contra Kiev.
Cabe destacar que el Ministerio de Asuntos Exteriores de China se ha negado a calificar de invasión el ataque de Rusia a Ucrania. La línea de Pekín hasta ha sido la de promover las negociaciones, ya que China trata de posicionarse más lejos de Rusia de lo que se presentó a principios de febrero durante una reunión de alto nivel entre el presidente chino Xi Jinping y el presidente ruso Vladimir Putin.
Frente a ello, Estados Unidos, Reino Unido y la Unión Europea se han apresurado a imponer sanciones a Rusia en un intento de presionar a Putin para que detenga la invasión.