Rebajar del tipo de interés, modificar el plazo de amortización, reducir comisiones, eliminar cláusulas...
Rebajar del tipo de interés, modificar el plazo de amortización, reducir comisiones, eliminar cláusulas abusivas y recortar o mejorar vinculaciones o productos asociados a la hipoteca son algunas de las razones para cambiar la hipoteca. Un movimiento que muchos de los que tienen contratado un préstamo por su vivienda se plantean. Sobre todo en estos últimos tiempos en los que el panorama económico, con un aumento generalizado de los precios o las consecuencias del conflicto entre Rusia y Ucrania, es poco alentador para el bolsillo.
La mejora de las condiciones de la hipoteca puede suponer un ahorro medio de hasta 102 euros al mes, según los cálculos de Trioteca, que recomienda tener en cuenta los varios factores para acertar con el cambio de hipoteca. "Antes de negociar con la entidad bancaria, es fundamental tener claro en qué consiste la hipoteca actual, su fase del pago del crédito, cláusulas, comisiones y vinculaciones", dicen.
¿Qué tener en cuenta para acertar con el cambio de hipoteca? Lo primera es analizar y comparar las ofertas de varias entidades financieras para asegurarse de que las condiciones que ofrece el banco son las más adecuadas. Otro punto importante es saber el capital que queda por amortizar. "Suele resultar más rentable mejorar las condiciones de la hipoteca en los primeros años de vida del préstamo, porque en ese periodo es cuando se pagan básicamente los intereses y poco capital amortizado. Al contrario, si se cambia de hipoteca en sus últimos años, ya se han pagado casi todos los intereses y es más difícil amortizar los gastos derivados de la operación", explican.
Conviene también tener en cuenta que el cambio de hipoteca implica abonar gastos. "Para saber si compensa, es recomendable calcular la cuota de la nueva hipoteca y el tiempo que se tardará en amortizar la operación para saber si el ahorro que se consigue con el cambio de hipoteca es superior o no a los gastos que supone la operación", apuntan. Además, muchos bancos aplican una penalización por cancelación de hipoteca, por lo que conocer las implicaciones y penalizaciones de cancelar la hipoteca con el antiguo banco y las cláusulas del contrato es clave para evitar sorpresas y no pagar más.
El banco con el que se formalice la nueva operación puede pedir condiciones como contratar seguros de vida y hogar, planes de pensiones o tarjetas de crédito, por lo que hay que valorar qué implican estos productos asociados y si son realmente convenientes.
El 55% de los españoles dedica más del 20% de sus ingresos a pagar la hipoteca o el alquiler, algo que asciende hasta el 58% en adultos de entre 35 a 44 años, y que desciende al 30% en adultos de 55 a 65 años, según los datos de la plataforma global de investigación de mercados Appinio.
En cuanto a la situación actual de los españoles con respecto al tema de la vivienda, el estudio añade que el 60% tiene vivienda en propiedad, de los que el 34% aún está pagando la hipoteca. Por el contrario, el 37% no cuenta con una vivienda en propiedad, mientras que el 3% restante cuenta con varias viviendas. Sobre los motivos para no adquirir vivienda en propiedad, para el 41% de los españoles los precios son demasiados altos, el 36% no cuenta con los ahorros suficientes y para el 23% los requisitos de las entidades bancarias complican el acceso a una hipoteca.