Este sector ha mostrado un comportamiento atípico tras la pandemia, más dinámico de lo esperado
¿Mantendrá el mercado inmobiliario el dinamismo iniciado en 2021? Después de haber mostrado un comportamiento atípico tras la pandemia, el sector se enfrenta ahora a la ola de inflación y a las consecuencias de la guerra en Ucrania y su impacto en la economía. Pese a este escenario, se espera que el dinamismo continúe y que siga siendo un sector muy atractivo para la inversión.
"El mercado de la vivienda ha mostrado un comportamiento atípico tras la pandemia, más dinámico de lo esperado en un contexto de incertidumbre y deterioro internacional", pero la "intensa demanda interna en el mercado residencial y el regreso paulatino del comprador extranjero mantendrá al inmobiliario español como un sector muy atractivo para la inversión", asegura el consejero delegado para España, Portugal y Andorra de Engel & Völkers, Juan-Galo Macià.
Prevé que, a pesar de las tensiones inflacionistas y geopolíticas, el ahorro acumulado se seguirá destinando a la vivienda y la inversión internacional retomará su espacio y se convertirá en uno de los impulsores del sector durante este año.
"A medio plazo, el efecto de las sanciones a Rusia va a provocar una desaceleración de la demanda del mercado residencial que aleja las posibilidades de generación de una burbuja en 2024. La menor subida del precio y de las ventas junto con un aumento más rápido del principal tipo de interés de referencia del Banco Central Europeo (BCE) permitirán una etapa expansiva más larga, si la inflación vuelve a su nivel habitual a finales de año o principios del próximo", remarca, por su parte, Gonzalo Bernardos, profesor de Economía y director del Máster Inmobiliario de la Universidad de Barcelona.
Estima que este año se inicien como máximo 145.000 viviendas, una oferta completamente insuficiente para el volumen de la demanda. "Esta oferta constituye uno de los principales problemas del mercado residencial en la actualidad", subraya. La obra nueva volverá a acaparar el protagonismo ante la consolidación de la promoción en aquellos mercados de elevado volumen de población. No obstante, el desequilibrio entre la oferta y la demanda de estos inmuebles ha encarecido su precio en las grandes ciudades y zonas de atracción turística ante la falta de suelo.
Por ello, es previsible que la vivienda nueva vuelva a subir más que la de segunda mano en función de la evolución de la inflación y los tipos de interés. A la imparable escalada del IPC, con un impacto directo sobre los costes de construcción y el transporte, se une el empeoramiento de las condiciones de financiación, donde el euríbor, aún en negativo, ha iniciado ya la tendencia alcista.
Desde Aedas Homes destacan la "buena salud" del mercado inmobiliario, "que está creciendo a muy buen ritmo y, lo más importante, sobre unos cimientos sólidos". La promotora residencial subraya el crecimiento exponencial del cliente internacional, que ha pasado de representar el 9% al 18% de la cartera de la compañía, con los holandeses al frente, nacionalidad de aglutina el 11,3% de las operaciones, por delante de los suecos (10,9%) y británicos (8,9%), que pierden su hegemonía. "En porcentaje de reservas de la compañía, más del 20% tuvo como protagonista a compradores extranjeros, entre los que han desaparecido los rusos, que han pasado de representar el 5% de las compras internacionales en 2020 en al 2,8% en 2021", afirma su director comercial y de marketing, Pablo Rodríguez-Losada.
¿Puede la subida de tipos de interés frenar el crecimiento de la inversión en compra de vivienda? Los especialistas en el sector inmobiliario de The Simple Rent creen que esta tendencia se va a rebajar durante el 2022 por varias razones relacionadas tanto con temas financieros, como con la logística y la construcción, haciendo que pueda frenarse ligeramente el crecimiento de la inversión en la compra de vivienda.
Señala tres claves que marcarán el futuro más próximo dentro del sector. Una de ellas es el encarecimiento de la vivienda de obra nueva por el impacto general de la subida de precio de los materiales de construcción. Otro de los factores que puede frenar la euforia en el mercado inmobiliario y en la inversión es la subida de tipos gradual que se espera ejecute el BCE los próximos meses. "Esta subida de tipos encarecerá las hipotecas, algo que sin duda afecta directamente al proceso de compraventa y la firma de dichas hipotecas. El incremento de los tipos podría ofrecer a los inversores ciertas alternativas para canalizar sus ahorros, reduciendo la opción de la compraventa como una inversión", explican.
Finalmente, opinan que la nueva Ley de Vivienda supone "un apoyo importante para el fomento del alquiler y quizá el porcentaje de las viviendas de obra nueva en una misma promoción que se destinen a vivienda social sea una forma de contribuir al frenazo de esta tendencia".