Día mundial del ahorro: cómo hacer frente a facturas e inflación y dónde meter el dinero
El objetivo de esta fecha es el de concienciar sobre la importancia de este hábito y sus beneficios
En épocas de altos precios, el Día mundial del ahorro que este lunes 31 de octubre se celebra cobra aún más importancia. El objetivo de esta fecha es el de concienciar sobre la importancia de este hábito y sus beneficios en la gestión de las finanzas personales. Elegir los proveedores más económicos para los suministros del hogar, seguir fáciles pautas para contener el gasto o poner el dinero a trabajar son algunos de los consejos más útiles.
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Por ejemplo, estas son algunas recomendaciones para impulsar el ahorro personal y gestionar los pagos así como ahorrar de forma real de una manera sencilla aportados por plataformas como la compañía de gestión de cobro de deuda KRUK o la web de ofertas Chollometro.
Hacer un seguimiento de los gastos. Identificar los hábitos monetarios, haciendo inventario y estudiando los gastos de la cuenta corriente ayudará a identificar a qué estás dedicando más dinero. Recomiendan comenzar almacenando los gastos fijos para ir añadiendo día a día los gastos variables. Tener un seguimiento con un Excel ayuda mucho a registrar cuánto entra y sale de tu cuenta corriente. Además, ten en cuenta que ningún truco de ahorro sirve de nada si no cuentas con la motivación necesaria para hacerlo.
Reducir el gasto. Analizar los gastos personales y categorizarlos permite profundizar en nuestro desembolso cotidiano y, por lo tanto, minimizarlo. Buscar alternativas más baratas para gastos fijos como el seguro del coche, el de la casa o la cuota del teléfono, revisar las suscripciones activas y valorar su uso, aprovechar las ofertas para llenar la cesta de la compra o sumarse a descuentos a la hora disfrutar de planes de entretenimiento son algunas ideas que también permiten ahorrar.
Usar apps de gestión de ahorros. Si prefieres clasificar tu dinero de una forma más sencilla, puedes utilizar una aplicación de presupuesto que te permitirá administrar el dinero sobre la marcha. Existen apps de gestión de ahorro que te permiten registrar cada gasto realizado y marcarte unos objetivos de ahorro de forma individual o en común con otras personas que utilicen la app, de modo que conseguirás un mayor control de tus finanzas.
Utilizar la regla del ahorro. Se trata de la regla 50/30/20, según la cual el 50% de los ingresos se destinan a los gastos ordinarios, un 30% a actividades de ocio y un 20% al ahorro. Esta guía permite tener un control exhaustivo de los gastos para fomentar el ahorro. Si eres de las personas que tienen problemas para reservar una cantidad concreta de tu dinero, puedes automatizar tu cuenta para que una parte de tu sueldo se derive mensualmente a una cuenta de ahorro.
El ahorro como gasto fijo. Tener en cuenta una cantidad determinada de ahorro como si de un gasto fijo más se tratara es muy recomendable ya que permite establecer una rutina de ahorro en las finanzas personales. La cuantía por ahorrar ha de responder a la realidad de los ingresos y gastos que se tengan, actualizándose en el momento en el que estos cambien, tanto si aumentan como si disminuyen. En la categoría de los gastos fijos es imprescindible tener en cuenta las deudas activas.
Revisar el consumo de energía. El ahorro energético es un factor que debe tenerse muy en cuenta. Algunos trucos como apagar las luces cuando no hay nadie en la vivienda, desenchufar los aparatos electrónicos y poner la lavadora solamente cuando esté llena ayudan a evitar el gasto innecesario de energía. También se recomienda pintar la vivienda con colores claros para tener un hogar más luminoso, instalar un termómetro para saber la temperatura real y aprovechar el calor residual de la casa para evitar poner la calefacción. Además, comparar tarifas entre distintas compañías te ayudará a conseguir un mejor precio.
Comparar es ahorrar. Las plataformas de chollos y promociones permiten ahorrar en la compra de cualquier producto en tiendas online y físicas. Ya sea a través de su web o su app, los usuarios pueden encontrar y compartir descuentos en todo tipo de productos, como viajes, material deportivo, motor y textil. Estas plataformas ofrecen descuentos significativos durante todo el año.
Valorar la necesidad real. Esperar y reflexionar antes de comprar un artículo es una práctica que, sin duda, ayuda a no gastar dinero de manera innecesaria. Es frecuente hacer compras por impulso sin que respondan a una necesidad verdadera. Esperar un tiempo y evaluar si el producto o servicio es necesario evitará hacer compras que son prescindibles. En este sentido, es importante prestar atención especialmente a gastos importantes como la compra de una cosa, coche o similares. En general, este tipo de gastos son los principales por los que muchas personas se endeudan.
ELEGIR LOS PROVEEDORES DE SUMINISTROS MÁS ECÓNOMICOS
Elegir los proveedores más económicos para los suministros del hogar permitiría ahorrar, de media, 1.906,70 euros al año, lo que supone recortar en un 17,3% el coste promedio que las facturas generan en la economía familiar. Sin embargo, el tijeretazo puede llegar hasta los 3.311,11 euros al año si los servicios que un hogar tiene contratados están entre los más caros del mercado y se contratan las mejores ofertas, según un análisis realizado por Kelisto.
Del total de sus gastos, el 37,69% se destina al pago de las facturas del hogar. Por ello, el portal ha elaborado una guía que explica cómo y cuánto se tarda en cambiar de proveedor de las facturas del hogar:
Seguros. Desde enero de 2016, el plazo para cancelar una póliza de seguro en nuestro país es de un mes, aunque se mantiene el plazo de dos meses que tiene la aseguradora para comunicar cambios en las condiciones de la póliza o la intención de no renovarla. Aunque, en la mayoría de los casos, basta con informar a la compañía de forma telefónica sobre la intención de dar de baja la póliza, conviene comunicar la renuncia por escrito, o bien, consultar con la aseguradora cuál es su procedimiento habitual para estos casos.
Telefonía móvil. El plazo previsto para el cambio de compañía de telefonía por la legislación vigente es de un día hábil desde el momento que el usuario llega a un acuerdo con el nuevo operador, aunque en los casos en los que la SIM debe mandarse por correo el proceso puede retrasarse hasta que se reciba la nueva tarjeta. Recuerda que los plazos se miden en días hábiles, de modo que si solicitas el cambio un viernes deberás esperar al lunes siguiente para que se haga efectivo.
Si has solicitado una portabilidad, tu compañía recibirá la petición por parte del nuevo operador y tramitará la baja de los servicios de forma automática. En este caso, el cambio de operador se realiza entre las 02:00 am y las 06:00 am y en ningún momento te quedarás sin servicio. Si no has solicitado portabilidad, pero tenías los servicios contratados con otro operador, tendrás primero que darte de baja primero con tu compañía actual, no basta con contratar la nueva para que se cancele la anterior tarifa.
Fijo e Internet. Los usuarios pueden cambiar de compañía de telefonía fija en un solo día laborable solicitando la portabilidad, que permite irse a otra operadora gratuitamente conservando el número. Sin embargo, en el caso de paquetes de banda ancha con telefonía fija, el plazo máximo es de siete días, ya que los operadores -tanto el que pierde el cliente como el que lo gana- han de realizar trabajos extraordinarios en la central telefónica para proveer el servicio de banda ancha.
Cuentas bancarias. Desde la entrada en vigor en 2019 de la ley de traslado de cuentas de pago, cambiar una cuenta de banco solo requerirá que hagas un trámite: facilitar a tu nueva entidad el antiguo número de tu cuenta, algunos datos personales y todos los pagos y cobros que quieras llevarte. El resto de trámites para que esta portabilidad bancaria se haga realidad serán responsabilidad de tu nuevo banco, que te tendrá que pedir al antiguo -en un plazo máximo de dos días- un listado con las transferencias y domiciliaciones habituales que tenías, una transferencia de tus ahorros y el cierre de tu antigua cuenta.
Electricidad. Para cambiar de compañía energética lo único que tienes que hacer es ponerte en contacto con la nueva empresa con la que quieras contratar y ella se encargará de los trámites. Solo deberás enviar el contrato firmado junto con la documentación que te soliciten: normalmente es suficiente con el DNI, los datos bancarios para la domiciliación de los pagos y los datos del suministro, es decir, el código CUPS que aparece en las facturas y que identifica cada punto de suministro de energía.
El cambio de compañía se produce entre 15 y 20 días después de la solicitud. Cabe recordar que el cambio de compañía no implica cortes en el suministro. Este cambio tampoco te supondrá ningún coste adicional, a no ser que tengas alguna cláusula de permanencia con tu actual comercializadora. Es recomendable que revises tu contrato para comprobar que no tienes ningún compromiso de permanencia, aunque son cada vez menos habituales.
PONER LOS AHORROS A TRABAJAR
En este escenario y a pesar de no ser una tarea sencilla, ahí van cinco consejos para poner el dienero a trabajar en estos tiempos, de la mano de Finanfox.
Mantén tus finanzas en orden. No puedes tener una economía personal o familiar saneada si no tienes un control de tus finanzas. Es decir, necesitamos conocer con exactitud cuánto dinero entra en tu hogar (ingresos) y controlar todo el dinero que sale (gastos, tanto fijos como variables). A esto hay que añadir la reserva de una cantidad de dinero todos los meses para nuestros objetivos y para el ahorro. Cuando tengamos controlados los ingresos, los gastos y el ahorro, trazaremos un presupuesto para no gastar por encima de nuestras posibilidades.
Cuidado con abusar de los créditos. Puede que los créditos nos parezcan una buena opción para tener cierta liquidez o para adquirir algún producto o servicio en un momento determinado, pero cuidado. Si vamos justos de dinero todos los meses, ¿qué nos hace pensar que tener la obligación de hacer frente a un crédito puede mejorar nuestra situación? Si lo que compramos no es estrictamente necesario, debemos reflexionar y pensarlo dos veces antes de hacernos con otra letra que ponga nuestras finanzas en la cuerda floja.
Ten un fondo de emergencias. Si todavía no contamos con un 'colchoncito' económico para imprevistos es el momento de empezar uno. No es recomendable enfrentar una crisis económica sin tener un dinero que respalde nuestro nivel de vida o al que podamos acudir si las cosas se tuercen y perdemos nuestro trabajo, por ejemplo.
Continúa con la planificación financiera. Cuando estamos a las puertas de una recesión económica, las personas tienden a ponerse en 'modo pánico' y si tienen inversiones, empiezan a deshacerse de ellas. En el contexto actual, debemos hacer una pausa, respirar y seguir con nuestra planificación financiera a largo plazo. Las crisis son cíclicas y los mercados tardan relativamente pocos meses en recuperarse. Si nos ponemos a vender cuando todo el mundo quiere vender, pero muy pocos quieren comprar; lo único que harás será consolidar pérdidas y vender a precio de saldo las inversiones a otras personas que van a aprovecharse de la situación para obtener rentabilidad. Recuerda que el interés compuesto juega a tu favor porque las bajadas del mercado se ven compensadas con las subidas. Los mercados siempre van al alza, aunque caigan por épocas.
