¿Cansado de las comisiones? La banca online se convierte en refugio para escapar de ellas
A la vez que los bancos se vuelven más exigentes, los clientes buscan alternativas para no pagar
Pocas son las entidades que no están aumentando las exigencias a sus clientes a cambio de no pagar comisiones. Los usuarios, cansados de tener que desembolsar cantidades que pueden llegar hasta los 240 euros al año, buscan alternativas. Y la banca online se ha convertido en una de ellas. No hace falta buscar mucho, ya que la mayoría de los bancos tradicionales ofrecen este servicio.
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Con la llegada de la pandemia del Covid-19 a España y la entrada en vigor del confinamiento fueron ya muchos españoles los que en 2020 decidieron pasarse a la banca online. De hecho, prácticamente la mitad de los españoles asegura haber aumentado el uso de pagos digitales durante estos meses y que seguirá haciéndolo durante este año. Pero la posibilidad de operar desde casa no es el único motivo.
Las cuentas online también suponen un ahorro en comisiones si las comparamos con las cuentas tradicionales, un punto importante en una época como esta en la que cada vez más bancos se han lanzado a la piscina del cobro de comisiones.
Y es que la banca online demuestra tener unas condiciones mucho más competitivas que la banca tradicional, aseguran desde el comparador Kelisto, analizando las ofertas de entidades como Santander, BBVA, La Caixa, Banco Sabadell, Bankia o Bankinter, así como Openbank, N26, EVO Banco, Activobank, Imagin o Bnext. En cuanto a la vinculación exigida, ninguna de las entidades de banca online analizadas exige que los clientes cumplan con algún requisito para disfrutar de sus ventajas y esquivar las comisiones. La cosa cambia si nos fijamos en la banca tradicional, donde cada vez son más habituales el aumento de las comisiones o los requisitos exigidos para librarse de ellas.
Otra de las ventajas es la facilidad para ser cliente. Para abrir una cuenta online, es suficiente con ser mayor de edad, disponer de un documento de identidad en vigor, facilitar los datos personales básicos. En ocasiones se solicitará además un justificante de ingresos, aunque esto suele hacerse solo cuando se trata de una cuenta nómina o de cuentas que requieren unos ingresos fijos.
¿Y LOS NEOBANCOS?
Pero todo esto no afecta únicamente a los clientes de a pie. A empresas, pymes y autónomos también les toca de cerca. Así, muchos de estos actores están recurriendo a los neobancos como alternativa para la gestión de sus finanzas. Ante esto, más de un 10 % de los responsables de un negocio admiten que no saben bien los gastos bancarios que tienen de forma anual, según un estudio de Qonto, que destaca que cerca del 70 % de las empresas con menos de 50 empleados, paga al mes 500 euros en comisiones. Ante este paradigma, 7 de cada 10 pymes y startups afirman que consideran cambiarse a un neobanco.
