España es el segundo país europeo con mayor predisposición a prescindir de este método de pago
El dinero en efectivo cada vez cuenta con menos adeptos, una situación que ha aumentado con la llegada del Covid-19. El 64% de los españoles asegura que en el último año ha dejado cada vez más de usarlo. Es más, España es el segundo país europeo con mayor predisposición a prescindir de este método de pago.
Analizando la situación en toda Europa, cuatro de cada cinco consumidores dicen que utilizan menos dinero en efectivo desde que empezaron a emplear los métodos de pago contactless y el porcentaje de población que señala que preferiría que el efectivo no existiese presenta una tendencia al alza en todos los grupos de edad. De este modo, solo el 30% de los europeos señala que no quiere que el dinero en efectivo desaparezca.
Así se desprende de los datos publicados tras la última encuesta llevada a cabo por ING sobre métodos de pago. En ella, se detalla sin embargo que, durante los pasados seis meses, el pago en efectivo fue el más utilizado por los europeos (69%), seguido de la tarjeta bancaria con pin (65%) y el uso de una tarjeta sin pin (57%).
Las razones que llevan a los consumidores a optar por una u otra opción son principalmente de seguridad y conveniencia. Es decir, los europeos optan en su mayoría por opciones de pago rápidas y fiables que pueden variar en función de la cantidad a pagar. Los pequeños pagos en las tiendas son impulsados por la conveniencia, el 40% dice que selecciona su método de pago preferido porque es rápido de usar y el 23% selecciona el suyo porque es fácil. Pero para el desembolso de grandes y medianas cantidades, la seguridad influye más en la elección.
En promedio, los europeos utilizan entre cuatro y seis opciones de pago diferentes y un 25% de los consultados está completamente de acuerdo en que cuantas más opciones de pago tenga, mejor. A pesar de esto, la mitad de las personas encuestadas dijo que usan diferentes formas de pago online, no porque quiera, sino porque se ven obligadas, ya que no todos los proveedores disponen de las mismas formas de pago.
En este punto, España se sitúa en el cuarto puesto del ranking de países en preferir tener todas las opciones de pago posibles al alcance. Entrando en detalle, la forma de pago preferida por los españoles para las compras online son las tarjetas de crédito o débito (72%), aunque de este porcentaje solo el 23% almacena los datos en la app o web en la que compra. A este método le siguen Paypal (55%), las tarjetas prepago o regalo (13%) y las e-cards (12%). En cuanto a las compras en tiendas físicas, el pago en efectivo (67%) es el más utilizado junto con las tarjetas contactless sin pin (54%) y con pin (51%).