Reitera su ofrecimiento a los mercenarios para que se integren en el Ejército o se vayan a Bielorrusia
Vladimir Putin ha acusado a Yevgeny Prigozhin, líder de los mercenarios de Wagner, de "traicionar" a Rusia para su beneficio personal, después de la rebelión protagonizada este fin de semana contra su régimen. "Hemos conseguido evitar una guerra civil", ha comentado el dirigente durante una intervención pública realizada este martes.
"Han intentado utilizarlos desde la oscuridad y enfrentarlos a sus compañeros de armas, con quienes han combatido por el país y su futuro", señaló este lunes en otra intervención televisada.
"La rebelión habría sido aplastada. Los organizadores de la rebelión lo sabían a pesar de su suficiencia. Lo comprendían todo, que estaban perpetrando actos criminales, que estaban dividiendo y debilitando al país cuando afronta una colosal amenaza externa, una presión sin precedentes del exterior, cuando en el frente se dice '¡ni un paso atrás!' mientras mueren nuestros camaradas", añadió el dirigente, que ha sufrido la mayor amenaza a su poder desde que tomó las riendas de Rusia en 1999.
"Quienes organizaron la rebelión con su traición al país, su pueblo, traicionaron a quienes se vieron arrastrados al crimen. Les mintieron, les empujaron a la muerte", aseveró Putin, en referencia a Prigozhin, que este lunes también señaló que su objetivo no era derribar a Putin, sino evitar la desaparición de Wagner y tumbar al ministro de Defensa, Sergei Shoigu.
En este sentido, comentó que su principal objetivo era "evitar un gran derramamiento de sangre", por lo que agradeció a los "soldados y mandos del Grupo Wagner que tomaron la única decisión correcta. No se lanzaron a un derramamiento de sangre fratricida. Pararon en la última línea"
"Esto supuso tiempo y quienes cometieron un error tuvieron la opción de pensarlo dos veces, comprender que sus acciones estaban siendo rechazadas por la sociedad y que tendrían consecuencias trágicas, destructivas para Rusia. Sabíamos y sabemos que la vasta mayoría de los combatientes y mandos del Grupo Wagner son patriotas rusos, leales al pueblo y al Estado. Lo han demostrado con su valor en el campo de batalla", aseveró.
Por ello, reiteró su ofrecimiento a que se integren en las Fuerzas de Seguridad rusas para "seguir sirviendo a Rusia firmando un contrato con el Ministerio de Defensa u otros organismos o volver con vuestra familia y amigos. Quien quiera pude irse a Bielorrusia. Cumpliré con la promesa que he hecho. Lo repito. La elección es vuestra, pero estoy seguro que será la elección de soldados rusos que se han percatado de su trágico error".
Por último, mandó un mensaje a Occidente y Ucrania al señalar que "los neonazis de Kiev y sus patrones occidentales y todo tipo de traidores nacionales se frotaban las manos. Querían que los soldados rusos se mataran entre sí, que murieran militares y civiles para que al final perdiera Rusia y que nuestra sociedad se dividiera, se ahogara en un sangriento conflicto civil. Soñaban con vengarse por sus fracasos en el frente y en su supuesta contraofensiva, pero han errado en sus cálculos".