Macron acusa a Le Pen de ser la esclava de Putin en un encendido debate televisado
Le Pen reconoce los "esfuerzos" de Macron en la crisis de Ucrania pero critica el embargo energético a Rusia
El presidente francés, Emmanuel Macron, ha acusado este miércoles a su rival de extrema derecha, Marine Le Pen, de ser esclava del presidente ruso, Vladimir Putin, por un préstamo bancario ruso concedido hace años a su partido, durante un encendido debate televisivo de cara a las elecciones del domingo.
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Macron también acusó a Le Pen de albergar un deseo irrefrenable de sacar a Francia de la Unión Europea (UE), y ella contraatacó con la promesa de devolver el dinero a los bolsillos de millones de franceses empobrecidos durante sus cinco años de presidencia.
El debate -el único de la campaña- estuvo salpicado de llamamientos a "no interrumpirme" y de acusaciones de no estar a la altura de la tarea de liderar Francia, miembro del Consejo de Seguridad de la ONU con derecho a veto y segunda economía europea.
"Deja de mezclar todo", le dijo un combativo Macron a Le Pen durante un acalorado intercambio de comentarios sobre la deuda de Francia, que al igual que otras se ha hinchado debido a las medidas de apoyo a la pandemia.
Sin embargo, Le Pen ha reconocido los "esfuerzos" del presidente del país respecto a la diplomacia entre Ucrania y Rusia en el marco de la guerra, aunque ha criticado las sanciones impuestas a las exportaciones de gas y petróleo ruso. "Los esfuerzos que ha hecho para tratar de encontrar en nombre de Francia los medios para la paz merecen ser apoyados", ha reconocido Le Pen durante el debate de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales, donde ha querido "ser clara" respecto al respaldo a las medidas de apoyo económico, humanitario y militar a Ucrania.
La candidata de ultraderecha, sin embargo, ha criticado "el bloqueo de las importaciones del gas y el petróleo ruso" pues considera que "no es el buen método" para perjudicar los intereses del país euroasiático.
Para Le Pen, que está por detrás de Macron en las encuestas, con una diferencia de hasta 56-44, el debate era una oportunidad para convencer a los votantes de que tiene la talla para ser presidenta y de que no deben temer ver a la ultraderecha en el poder.
Un sondeo realizado para el canal de televisión BFM mostró que el 59% de los encuestados consideraba que Macron era el más convincente de los dos, sin embargo, no estaba claro cómo se traduciría esto en las intenciones de voto el domingo.
