El divorcio caótico es más probable si se rechaza el plan de May otra vez
El drama del Brexit está otra vez en un punto muerto. Cuando se cumple la fecha inicialmente prevista para activar el artículo 50 del Tratado de la UE que lo regula, no hay ni un sólo indicio claro de cómo va a acabar el proceso que se ha prorrogado, por lo menos, otras dos semanas. Los analistas y los mercados están tan divididos como los parlamentarios británicos y se repite la pregunta de si no es hora de aceptar que no hay escapatoria al desastre.
En estos momentos, pesa más el deseo de que el desenlace no sea un Brexit duro que las posibilidades reales de que se evite la caída por el precipicio. Pero llama la atención un indicador que alimenta la esperanza: la libra ha abandonado la extrema volatilidad de semanas pasadas, aunque el jueves volvió a sufrir y cedió los 1,31 dólares a los que se había sujetado los días anteriores y cayó a mínimos no vitos desde el 21 de marzo. No obstante, se mantiene en el rango de los últimos días lo que significa, para los expertos de Rabobank, que "los inversores evalúan los acontecimientos del miércoles y jueves en busca de señales positivas entre el caos reinante".
"La amenaza de que haya un Brexit sin acuerdo es grande", subraya la firma de inversión holandesa y coincide con Lukman Otunuga, analista de FXTM, quien expone que "crecen los temores de que el divorcio se produzca sin que medie un pacto". En definitiva, los economistas aceptan que hoy es más probable el llamado desacople desordenado que antes de las 'votaciones significativas' del Parlamento.
Con todo, no se descartan otros escenarios. "Hay cuatro posibles formas de avanzar: el acuerdo de la primera ministra británica, Theresa May, un 'no acuerdo', un segundo referéndum o un acuerdo de May que incluya una unión aduanera permanente", apuntan los expertos de Danske Bank. El siguiente paso es una nueva votación del texto salido de las negociaciones de dos años entre Londres y Bruselas.
A LA TERCERA, ¿VA LA VENCIDA?
El sacrificio de la 'premier', que ha puesto su cargo a disposición del partido antes del verano a cambio del apoyo de los 'tories' a su Acuerdo de Retirada ha logrado atraer a una veintena de diputados conservadores. Toda la atención está ahora "en si se puede insuflar nueva vida al texto de May" que se presentará este viernes ante la Cámara de los Comunes Pero no será exactamente una nueva votación.
Este viernes se presentará una moción que da luz verde al acuerdo de divorcio que alcanzó con la UE el pasado mes de noviembre. Un texto con el que la Cámara de los Comunes "toma nota" de lo acordado en el consejo europeo de la semana pasada en Bruselas y que si no da su visto bueno al Acuerdo de Retirada esta semana, el plazo para que se produzca la salida de Reino Unido de la UE se ampliará solo hasta el 12 de abril y que "cualquier extensión más allá del 22 de mayo de 2019" exigiría al país celebrar las elecciones al Parlamento Europeo.
El Gobierno quiere con esta moción que el Parlamento debata solo el Acuerdo de Retirada y si consigue el respaldo considera que con ello habrá satisfecho la exigencia formulada por la UE. Sin embargo, el resultado no cumplirá los criterios de la legislación británica para que el paquete de salida sea formalmente ratificado.
Lo cierto es que los números no le salen a la 'premier'. Ahora mismo, cuenta con 270 apoyos de los 320 necesarios para superar el trance. Su oferta de dimisión a cambio del apoyo de los 'tories' partidarios del Brexit ha logrado atraer a una veintena de diputados, pero le siguen faltando muchos apoyos más para superar el trámite en la Cámara de los Comunes. Y lo que es peor, no ha convencido al DUP, el Partido Unionista Democrático de Irlanda del Norte, que ha confirmado que votará en contra de la propuesta de la 'premier', lo que arroja muchas dudas sobre las posibilidades de que el acuerdo salga adelante.
"Todavía existe la posibilidad de que Theresa May reciba suficiente respaldo para su trato", indica Neil Wilson, analista de CMC Markets. "Hemos visto a varios parlamentarios 'tories' moverse hacia su acuerdo, pero sin el DUP se necesita del apoyo de los laboristas", prosigue y añade: "Esperar que los parlamentarios laboristas respalden su trato es como cazar unicornios".
¿HAY ALGUNA ALTERNATIVA?
Si como se prevé en las quinielas, el resultado es un nuevo rechazo al texto acordado con la UE, se volverá al punto crítico del salto sin paracaídas. No obstante, los expertos de Berenberg y de UBS son optimistas. "El apoyo parlamentario al 'Brexit duro' es escaso", indican desde el banco de inversión británico. Además, "hay más partidarios de un acuerdo aún más suave del que plantea la 'premier'", comentan desde la entidad germana.
Así las cosas, "La opción de un nuevo referéndum no ha quedado completamente descartada", ya que fue la opción que aglutinó más diputados durante los 'votos significativos' del miércoles, con 268 diputados a favor frente a 295 en contra. Se votaron otras siete mociones no vinculantes: un plan para que Reino Unido permaneciera en la Unión Aduanera, una revocación del Artículo 50 para evitar un Brexit desordenado y un plan alternativo presentado por el Partido Laborista.
"Esta serie de votaciones no son más que el primer paso en el camino de encontrar con una mayoría en la Cámara de los Comunes", concluyen los expertos de la entidad germana.