Cree que asumió como Jefe del Estado su responsabilidad y su compromiso con la Constitución
El Rey Felipe VI ha presidido este martes el acto organizado por el Congreso de los Diputados para conmemorar el 40 aniversario del fracaso del golpe de estado del 23 de febrero de 1981. En su discurso, ha ensalzado la figura de su padre, Juan Carlos I, destacando su papel e importante labor durante ese día.
El Rey Juan Carlos I asumió como Jefe del Estado su responsabilidad y su compromiso con la Constitución para que se tomaran todas las medidas necesarias para mantener el orden constitucional dentro de la legalidad vigente, así lo comunicó a todos los españoles en un mensaje televisado que ya forma parte de nuestra memoria colectiva. Su firmeza y autoridad fueron determinantes para la defensa y el triunfo de la democracia, ha dicho Felipe VI.
"Hace hoy 40 años España vivió un ataque de extraordinaria gravedad contra su sistema democrático de derechos y libertades", pero "el rechazo institucional y ciudadano a la ruptura de nuestro marco de convivencia fue decisivo para detener y vencer aquel golpe de Estado", ha señalado en su discurso.
Por su parte, la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, también ha ensalzado el papel del rey emérito por defender la democracia y usar la capacidad constitucional para derrotar a los golpistas. Durante su intervención en el acto, Batet ha incidido en que hace cuarenta años se supo responder con "firmeza y éxito" a un asalto que quiso acabar con la libertad y la pluralidad de España.
Batet ha recibido al Jefe del Estado junto al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez; la presidenta del Senado, Pilar Llop; el presidente del Tribunal Constitucional, Juan José González Rivas; y el presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Carlos Lesmes.
También han estado presentes en el acto Pablo Casado, presidente del PP, así como los miembros de Vox, Ciudadanos, Unidas Podemos, Más País-Equo y buena parte del Grupo Mixto. No obstante, ERC, PNV, Bildu, Junts, el PDeCAT, el BNG y la CUP no han acudido a la ceremonia, en línea con lo que suelen hacer en los actos en los que participa el Rey o que conmemoran los aniversarios de la Constitución.
Este martes se cumplen 40 años desde que el coronel Antonio Tejero irrumpió el Congreso durante la investidura de Leopoldo Calvo Sotelo para dar un golpe de estado. Fusil en mano, Tejero entró al grito de "quieto todo el mundo". Menos de una hora después Milans del Bosch declaraba el estado de excepción y desplegó la División Maestrazgo en Valencia.
Durante la madrugada de esa noche, el entonces Jefe del Estado, Don Juan Carlos de Brobón, anunció su negativa a apoyar el golpe: "La Corona, símbolo de la permanencia y unidad de la Patria, no puede tolerar en forma alguna acciones o actitudes de personas que pretendan interrumpir por la fuerza el proceso democrático que la Constitución votada por el pueblo español determinó en su día a través de referéndum", dijo.
Su ausencia durante el 40 aniversario ha levantado críticas por parte de algunos parlamentarios, entre ellos, las del senador del PP Rafael Hernando, que ha cuestionado que se pueda rememorar el 23F sin la presencia de quien contribuyó a desmontar la intentona golpista y a la continuidad de la democracia constitucional.