Este lunes, Ciudadanos sí ha confirmado que no pactará con Sánchez ni con los socialistas
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, no cierra la puerta a pactar con ninguna fuerza politica tras las elecciones generales del 28 de abril. Ante la pregunta de si volverá a buscar el apoyo de los partidos independentistas para ser presidente, ha señalado que "no cierro la puerta a ello como tampoco cierro la puerta a entenderme con Ciudadanos o el Partido Popular".
Este lunes, Ciudadanos sí ha confirmado que no pactará ni con el actual presidente del Gobierno ni con los socialistas tras las elecciones para formar un nuevo Ejecutivo.
"Los presupuestos lo son todo para un Gobierno", ha comentado Pedro Sánchez al ser preguntado por la razón que ha motivado la convocatoria de elecciones anticipadas en España el 28 de abril de 2018.
El presidente del Gobierno ha concedido una entrevista a Televisión Española en la que ha defendido su gestión, pese a que su Gobierno tan sólo ha durado ocho meses. "Cuando ya no se puede gobernar más, hay que darle el voto a la ciudadanía", ha añadido.
Sánchez ha defendido sus medidas a través de Reales Decretos Leyes (ha aprobado 25 durante su mandato) porque eran medidas "urgentes" que necesitaban una aprobación rápida. También ha denunciado "el obstruccionismo parlamentario" de la oposición.
"Me parece peligroso que se tache a un presidente de ocupa, de golpista y de ilegítimo", ha comentado en referencia a las críticas por haber llegado al Gobierno mediante una moción de censura. "Hemos atendido las urgencias sociales y hemos dinamizado la economía, pero hemos llegado al límite por el veto de las fuerzas independentistas a los presupuestos".
"Nunca ha habido un acuerdo con los independentistas", ha defendido Sánchez para justificar la moción de censura a Mariano Rajoy tras la sentencia de la trama Gürtel que acusó al Partido Popular.
Sobre el apoyo de Podemos, ha "agradecido" al partido liderado por Pablo Iglesias su alianza en muchas iniciativas, aunque también ha añadido que se han equivocado en determinadas cosas, como en no apoyar el Real Decreto sobre el Alquiler.
Sánchez ha reiterado su apuesta por el "diálogo" dentro de la Constitución y ha acusado a PP y Ciudadanos de "desgastar al Estado" con la cuestión catalana. "Hay partidos que viven del agravio territorial, que quieren un 155 permanente para enquistar el problema de Cataluña", ha añadido.
Sobre la reivindicación de los independentistas catalanes, ha señalado que "tienen pavor a sentarse a negociar" porque están "bloqueados" y temen reconocer que "la independencia no es posible en Cataluña".
En su opinión, PP y Ciudadanos tienen una "visión muy estrecha de la Constitución". También ha señalado que "el problema de la derecha en España es que gobierne el Partido Socialista".
Ante la posibilidad de otorgar un indulto ante una posible condena por el juicio al Procés, ha afirmado que "ahora lo que hay que hacer es respetar al Poder Judicial, que está haciendo un excelente trabajo. Esa pregunta se tendrá que plantear cuando haya una condena".
Sobre las críticas recibidas por purgar a los socialistas críticos con su gestión, Sánchez ha comentado que eso no depende de él. El presidente ha recibido muchas críticas por sustituir de sus cargos a Soraya Rodríguez y a José María Barreda.
Al ser cuestionado sobre la posibilidad de que Josep Borrell encabece las listas del PSOE a las elecciones europeas, ha señalado que "sería un gran candidato".
En relación a sus proyectos si consigue gobernar tras las elecciones, se ha comprometido a aprobar un nuevo Estatuto de los Trabajadores y a derogar la reforma laboral, aunque para ello ha añadido que "necesitará muchos más" de los actuales 84 diputados.
Por último, Sánchez se ha comprometido a realizar debates con el resto de fuerzas políticas, aunque ha dejado la elección de su formato en manos de los responsables de las campañas electorales.