Los inquilinos que les toque revisar su alquiler en agosto pasarán a pagar una renta media de 663 euros
La renovación de los contratos de alquiler de viviendas sigue topada al 2% hasta finales de año. Desvincular la actualización de rentas de la inflación supondrá que un arrendamiento de un piso de dos habitaciones en España pasará a costar en agosto en torno a 663 euros/mes frente a los 720 euros el metro cuadrado que hubiera supuesto la subida vinculada al IPC, según un estudio realizado por Idealista, portal inmobiliario español.
Entre las medidas aplicadas en el Real Decreto-Ley de respuesta a las consecuencias de la guerra de Ucrania aprobadas hasta finales de año, se encuentran vigente que aquellos contratos de alquiler que les toque la revisión anual tendrán que limitar la subida de la renta aplicando el Índice de Garantía de Competitividad (IGC), que actualmente se encuentra en el 2%. Esta subida del 2% se mantendrá para los contratos de alquiler a los que les toque renovar durante el mes de agosto.
Tras el estudio realizado por Idealista, se estima que a los inquilinos que les toque revisar su alquiler durante agosto pasarán a pagar una renta media de 663 euros mensuales a nivel nacional, lo que supone 13 euros más al mes frente a hace un año (es decir, unos 156 euros más anuales).
En las grandes ciudades es donde más se va a notar la subida, dentro de la limitación de rentas al 2%. En Barcelona, los alquileres aumentarán unos 18 euros más al mes, para colocarse la renta actualizada en 918 euros/mes de media, lo que provocará que superen los 215 euros más al año.
En Madrid y Bilbao, mientras tanto, los alquileres se quedarán de media en 842 euros/mes, tras un incremento de 17 euros mensuales, menos de 200 euros anuales.
San Sebastián es donde más subirán los alquileres. Aplicando el 2% generalizado de subida en la renovación de los contratos, el arrendamiento medio de un piso de dos habitaciones pasa ahora a 969 euros/mes de media. Son 19 euros más al mes, lo que suponen casi 230 euros de subida anuales.
Por el lado contrario, en ciudades como Cuenca, Ciudad Real, Cáceres, Lugo o Teruel la subida de las rentas apenas se notará entre 7 y 8 euros más al mes, por lo que la subida anual será de menos de 100 euros al año y sus nuevos arrendamientos pasarán a entre 357 euros/mes y 408 euros/mes.
A nivel nacional, el alquiler medio de un piso de dos habitaciones hubiera pasado a los 720 euros/mes, tras aplicar una subida de 70 euros mensuales con la actualización de la renta al 10,8% de la inflación, lo que supondría casi 842 euros más al año.
De nuevo, la renovación de alquileres en las grandes capitales es donde se aplicarían las mayores subidas, y donde se apreciarían los principales contrastes:
En San Sebastián, la renta media pasaría a 1.050 euros/mes, tras un aumento de más de 100 euros mensuales. Esto supone más de 1.230 euros al año, y una diferencia entorno a los 1.000 euros.
En segundo lugar estaría Barcelona, con una nueva renta actualizada de 997 euros/mes, lo que supondría casi 1.165 euros más al año tras la renovación del contrato (97 euros más al mes). La diferencia con la realidad actual sería de unos 950 euros anuales.
Finalmente, en Madrid y Bilbao, la nueva renta se hubiera actualizado con esta última inflación en casi 90 euros más al mes, dejando un nuevo alquiler de 915 euros/mes. La renovación del arrendamiento superaría los 1.060 euros al año. El contraste con la actualización anual de las rentas al 2% que se está aplicando sería de unos 870 euros más al año.