Consejos a los padres sobre los juguetes antes del día de Reyes

“Conviene que los juguetes lleguen de forma equilibrada y que respondan a los gustos infantiles. Además, deben ser acordes a la edad del niño y deben garantizar la seguridad infantil”, dice Valentín Marínez-Otero, doctor en Psicología y profesor de la Facultad de Educación de la Universidad Complutense de Madrid (UCM).

Los expertos apuntan que los juguetes deben ser acordes a la edad del niño y deben garantizar la seguridad infantil

Tal y como dice, el juguete “debe promover el juego”, y aunque eso es algo que a priori parece obvio, no siempre es así. Es importante, afirma, que “contribuya al desarrollo del niño sin que por ello se pierda capacidad de disfrute”. Y en la misma línea se expresa la psicóloga infantil Ana Corbalán Tutau, que dice que siempre es importante que los juguetes “sirvan para reforzar los avances dentro del desarrollo del niño” porque, de otra forma, “pueden dejar de tener interés, ya sea porque les resulten demasiado infantiles o demasiado difíciles con respecto a su madurez”.

La experta apunta también que es importante que los padres se impliquen en la elección del juguete, en este caso a la hora de escribir la carta a los Reyes Magos, “hasta aproximadamente los cinco primeros años”, que es cuando los niños alcanzan “mayor autonomía” y son capaces de demostrar sus “preferencias” por los diferentes juegos.

Pero, ¿qué deben hacer los padres si los niños reciben muchos juguetes el 6 de enero? Corbalán apunta que, en casos como esos, la responsabilidad de racionalizarlos cae en los padres. “Si el niño recibe demasiados juguetes, en ocasiones se puede perder el interés por ellos sin realmente haberlos disfrutado”, ya que se puede sentir “abrumado y sobreestimulado”. Así, cree que, si ocurre, sería conveniente concretar con el resto de familiares lo que los niños van a recibir y si no es necesario, no incluirlo en la carta a los Reyes Magos. “Si por el contrario no es posible hacerlo y hay demasiados regalos, es mejor ir dosificándolos, así el niño los podrá disfrutar más”, remarca.

Martínez-Otero, por su parte, dice que siempre es mejor optar por la calidad, y no por la cantidad. Aunque alerta también de que, en contra de lo que muchos puedan pensar, “comprar el juguete más caro no garantiza que sea el mejor para el niño”. “Los padres deben orientar la elección de los niños, que no escapan al afán consumista de nuestro tiempo, para que lo que reciban por Reyes sea lo más equilibrado posible”, apunta el experto.

El profesor de la UCM también señala que la idea de racionalizar los juguetes, si el niño recibe muchos, no es nada descabellada. “Es una pequeña solución en estos días, en los que se puede pecar de exceso de regalos y que el niño se vea sobrepasado”, afirma Martínez-Otero, que insiste en que, “en cuestión de juguetes todo es equilibrio: no hay ni que pasarse ni que quedarse corto”.

¿SON LOS JUGUETES SEXISTAS?

Asimismo, los expertos también valoran el debate que ha surgido en las últimas semanas en torno a los juguetes, y si son o no sexistas. Hasta una campaña publicitaria ha abogado por dejar a los niños jugar con los juguetes que quieran, y esa es la postura que defienden ambos psicólogos. Ana Corbalán apunta que aunque los padres “suelen anticipar y guiar a sus hijos para que sus gustos sean los 'esperados' para su edad y su género”, sería importante “ser flexibles” a la hora de etiquetar si un juguete es de chicos o de chicas.

“Los niños exploran sin ninguna connotación negativa, salvo lo que les vamos diciendo los adultos”, recuerda la experta. A su juicio, los padres deberían darle a los juguetes “la importancia que tienen, en este caso la función de éstos no está en que el niño identifique su propio género, sino en potenciar sus habilidades tanto intelectuales como sociales”, señala.

Por su parte, Martínez-Otero llama a “evitar los estereotipos desde la temprana infancia” y por no tratar de “encarrilar” a los niños hacia un determinado tipo de juguetes por creer que son los adecuados para él. “Hay que ser flexibles, aunque es verdad que cada vez hay mayor sensibilidad con este tema y que se intenta evitar prejuicios y estereotipos asociados al género”, afirma. Ser más flexibles es “recomendable” y “saludable” para el “desarrollo personal del niño”, concluye.

LOS NIÑOS ESPAÑOLES, LOS QUE MENOS JUGUETES RECIBEN

Aunque pueda parecer que los niños reciben muchos juguetes, desde la Asociación Española de Fabricantes de Juguetes (AEFJ) aseguran que no es así. Fuentes de la entidad han confirmado que los niños españoles son de los que menos juguetes reciben al año. En concreto, les regalan una media de 9 juguetes frente a los 11 que reciben los italianos, los 23 de los alemanes, los 39 de los británicos o los 46 de los niños estadounidenses.

En España el 75% de las ventas anuales de juguetes se produce durante la campaña de Navidad, y el 54% se produce en el mes de diciembre

“El problema es que el mercado del juguete en España es muy estacional, y por eso da la sensación de que los niños reciben muchos juguetes”, explican desde la AEFJ, que afirma que el 75% de las ventas anuales se produce durante la campaña de Navidad, mientras que el 54% se produce en el mes de diciembre. “Puede dar la sensación de que se regalan muchos juguetes en Navidad, pero lo cierto es que los niños necesitan jugar durante todo el año y necesitan renovar sus juguetes a medida que crecen para que éstos sigan representando un reto para ellos y que no se cansen”, indican las fuentes consultadas.

La Asociación también explica que el gasto medio por niño y año en juguetes también es de los más bajos en España, donde la media se sitúa en los 184 dólares, frente a los 363 dólares que se gastan en Alemania, los 482 dólares de Estados Unidos o los 499 dólares que se desembolsan en Reino Unido. Pese a ello, la AEFJ prevé un aumento de las ventas en el mercado nacional, de entre el 5% y el 6% respecto a 2015.

Por último, la Asociación da siete consejos a los padres sobre los juguetes:

1. Debe llevar la marca CE, que garantiza que el fabricante se hace responsable de la seguridad del producto.

2. Hay que fijarse muy bien en las advertencias que se indican en la caja del juguete.

3. Ojo con la edad recomendada, sobre todo si el niño tiene menos de 3 años (el juguete puede contener piezas pequeñas).

4. El embalaje debe estar en el idioma nacional, y las instrucciones también.

5. Acudir siempre a establecimientos de confianza para adquirir el juguete.

6. Supervisar siempre el juego de los niños.

7. Tener en cuenta los gustos y preferencias de los pequeños.