Arcano y Cuatrecasas han diseñado la operación para facilitar la venta del grupo catalán
El proceso de venta de Grupo Zeta se calienta. Después de más de un año con el cartel de ‘Se vende’, Prensa Ibérica o Henneo podrían llevarse el gato al agua si se logra pulir algunos flecos. Uno de ellos, que el grupo que preside Antonio Asensio Mosbah -hijo del fundador de Zeta-, acceda a vender por separado Sport. Trocear Zeta no estaba entre los planes de sus propietarios, pero se perfila como la opción viable para dar cierre a un proceso que está dilatándose demasiado.
Arcano y Cuatrecasas, los asesores que han diseñado la operación, lo tienen claro. Desligar la cabecera deportiva del grupo puede facilitar la venta, sobre todo porque ya habría un potencial interesado: Vocento.
El grupo que edita ABC y El Correo, entre otros regionales y revistas, se retiró formalmente de las negociaciones con Zeta en octubre al considerar que el precio fijado por Asensio no se correspondía con su valor de mercado a la vista del bache que atraviesa el grupo.
La delicada situación financiera de Zeta y de sus principales cabeceras no justifican los 70 millones que sus propietarios pretenden obtener, además del bonus que su presidente aspira a lograr, y que ha sido un freno para los potenciales compradores porque no les salen las cuentas.
Pero si en esta operación Vocento logra hacerse con Sport, llenaría el hueco de la cabecera deportiva bien posicionada que sus rivales -Prisa (AS), Unidad Editorial (Marca) o Godó (Mundo Deportivo)- ya tienen, indican fuentes del sector a este medio.
Con Sport fuera de la ecuación, la venta de Zeta a Prensa Ibérica o Henneo es más que posible, afirman las mismas fuentes. Ambos grupos cuentan con el respaldo del pool de bancos a los que Zeta debe casi 100 millones de euros y cualquiera de ellos serviría para frenar el intento de Jaume Roures de hacerse con el grupo que edita El Periódico de Catalunya.
FRENO A ROURES
Las dudas de potenciales compradores habían colocado a Jaume Roures como principal candidato para hacerse con Zeta. El dueño de Mediapro estaría dispuesto a comprar todo el grupo catalán, aunque en un primer momento se interesó únicamente por El Periódico. Roures habría ofrecido alrededor de 60 millones de euros para hacerse con Zeta, por debajo de los 70 millones a los que Asensio quiere vender, recoge El Español. Si la venta se cierra en ese número y los bancos aceptan una quita de al menos la mitad, los propietarios de Zeta tendrían un margen de unos 10 millones tras pagar la deuda bancaria.
Esta oferta paró en seco la venta de Zeta a Prensa Ibérica, que no estaba dispuesta a elevar su oferta a ese nivel, aunque gozaba del respaldo de los bancos y, desde la trastienda, de Moncloa, para comprar Zeta y evitar que cayera en la órbita ligada al independentismo. Su negativa abrió la puerta a un nuevo actor cuya misión es evitar que Zeta quede en manos de Roures: Henneo.
El grupo aragonés -editor de Heraldo, 20 Minutos y La Información-, ha mantenido ya reuniones con Caixabank -que lidera el pool de bancos acreedores de Zeta del que también forma parte Santander, Sabadell y el Instituto Catalán de Finanzas- para abordar la operación, como recogió El Diario.
La operación tendría sentido para Henneo, que lleva varios años en plena expansión: en 2016 compró 20 Minutos y La Información y, más tarde, sonó en las quinielas para comprar Cinco Días a Prisa, pero la operación no cristalizó.
La venta de Zeta entra en fase crítica. Además de la deuda bancaria, la falta de liquidez ahoga al grupo y debe dinero tanto a proveedores como a Hacienda. Si no se llega a una solución, Zeta entrará en concurso de acreedores a finales de este año.