La empresa de transporte privado selló recientemente un acuerdo con su principal competidor ruso para unir su plataforma
Uber sigue intentando apagar sus fuegos. Esta vez, ha cerrado un histórico acuerdo para aliarse con su principal competir en Rusia, Yandex, y pasarán a formar una sociedad conjunta dedicada al transporte y logística.
El gigante ruso Yandex, tiene como matriz una herramienta de búsqueda, similar a la de Google, y posee el 65% de las búsquedas. La matriz cotiza en el Nasdaq y en la bolsa rusa y tiene una capitalización de 10.410 millones de dólares. Además de ser un buscador, también tiene un servicio de mapas y la mencionada aplicación de transporte privado en Rusia.
El gigante ruso Yandex, tiene como matriz una herramienta de búsqueda, similar a la de Google, posee el 65% de las búsquedas
Yandex.Taxi era la gran amenaza de Uber, y en un intento de frenar su sangría de pérdidas (708 millones de dólares en junio), ha decidido aliarse con su principal competidor. Lo contrario que la matriz rusa, cuyo crecimiento en viajes fue del 484% lo que supuso que el ebitda de Yandex.Taxi fuese de 20 millones de dólares en el pasado trimestre.
Con esta unión nacerá una nueva sociedad, de la que aún no se conoce el nombre y en la que participarán ambas multinacionales, aunque no con la misma fuerza. Uber inyectará 225 millones de dólares y Yandex invertirá 100 millones de dólares. Tanto la multinacional rusa como la estadounidense calculan que el híbrido tendrá una capitalización de 3.400 millones de dólares. A pesar de las cifras económicas, el control de la sociedad lo tendrá la gigante rusa con una participación del 59,3%, mientras que la estadounidense partirá con un 36,6%. El resto será para los empleados.
Uber decidió plantar su bandera en Rusia en el año 2013. Dos años antes, Yandex decidió volcar sus esfuerzos en el servicio privado de conducción. Con esta fusión tendrá servicio en más de 135 países. Además, la nueva empresa operará en Azerbaiyán, Armenia, Bielorrusia y Kazajstán.
A UBER NO LE PILLA DE NUEVAS
Uber ya tuvo que replegar filas en China. La empresa china Didi Chuxing y Uber tuvieron una lucha encarnizada por el control de los usuarios y se produjo una guerra de precios insostenible. Finalmente, la multinacional estadounidense tuvo que dar marcha atrás y diseñó la misma fórmula que la que ha decidido salvar la situación en Rusia.
Así pues, se fusionó con Didi en un proyecto de 31.300 millones de euros para salir adelante. Actualmente, Uber tiene una 17,7% de Didi y recibió 1.000 millones a cambio de la operación.
JUEGO DE TRONOS EN UBER
A la polémica de los taxis, el desajuste en las cuentas, también hay que sumar la falta de liderazgo en Uber, tras la marcha de Travis Kalanick, co-fundador y hasta no hace mucho consejero delegado. La multinacional sigue su propio casting para que alguien se siente en el particular trono de hierro y dirija la empresa. La cúpula directiva busca un candidato que sea capaz de no emborronar más el nombre de Uber en estos momentos complicados.
La mejor colocada era Carolyn Maccall, ex consejera delegada de Easy Jet, pero finalmente decidió marcharse a ITV y este lunes se hizo oficial su nuevo cargo. Marissa Mayer, ex consejera delegada de Yahoo o Kara Swisher, creadora del portal Recode, ganan enteros así, para poder ser el timón de Uber ,según apunta Bloomberg.