La compañía estadounidense contabilizó unas pérdidas netas de 513,7 millones de euros en el primer semestre del año
La compañía estadounidense de automóviles eléctricos, Tesla, contabilizó unas pérdidas netas de 513,7 millones de euros en el primer semestre del año. Este dato supone una fuerte subida del 70% respecto a los 'números rojos' del mismo período de 2015.
Tal y como recoge Europa Press, la firma explicó que sus resultados se vieron afectados principalmente por unas menores ventas de lo previsto con anterioridad durante el segundo trimestre del presente ejercicio y resaltó que la primera mitad del año estuvo marcada por la reciente propuesta de adquisición sobre SolarCity y por la ampliación de capital llevada a cabo.
La compañía estadounidense contabilizó unas pérdidas netas de 513,7 millones de euros en el primer semestre del año
Entre enero y junio, la empresa registró una cifra de negocio de 2.417 millones de dólares (2.158 millones de euros), lo que representa una progresión del 27,6% si se compara con los ingresos de dicho período de 2015.
En el segundo trimestre del año, la firma con sede en Palo Alto (California) contabilizó unas pérdidas netas de 293,1 millones de dólares (261,6 millones de euros), un 3,8% más respecto a los datos de dichos meses del año pasado.
Asimismo, la facturación trimestral de la compañía automovilística fue de 1.270 millones de dólares (1.133 millones de euros), lo que representa una progresión del 10,7% al compararlo con los ingresos del mismo trimestre de 2015.
Durante la segunda mitad del año, la multinacional prevé comercializar alrededor de 50.000 unidades de sus modelos Model S y Model X, así como alcanzar un ritmo de fabricación de 2.400 unidades diarias en el último trimestre.
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'Durante los primeros seis meses del año estuvimos en un infierno', admitió el fundador de la empresa, Elon Musk
'UN INFIERNO' DURANTE LOS SEIS PRIMEROS MESES
Parece que la compañía de Elon Musk va a necesitar una importante suma de dinero para cumplir sus objetivos, y es que la ambición del empresario no se corresponde con las expectativas de Wall Street hacia el rendimiento de la compañía. La estrategia de Musk pasa ahora por expandir la capacidad de producción y atender la demanda del nuevo Model 3, que empezará a circular a finales de 2017, este propósito le está llevando a quemar capital sin pensar en el margen de beneficio, que cayó al 21%, detalla El País.
"Durante los primeros seis meses del año estuvimos en un infierno", admitió después en la conferencia con analistas Elon Musk, que hasta en cinco ocasiones dijo lo "duro" que está siendo producir los coches.
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