Estée Lauder, L'Oréal y Procter & Gamble apuestan por la tecnología para fidelizar a sus clientes
Estée Lauder, L’Oréal y Procter & Gamble, tres de las grandes compañías del sector de la belleza, están apostando de forma clara por la inteligencia artificial para dar a los consumidores un servicio más personalizado y a la carta.
Así lo destacan los analistas de Singular Bank, quienes añaden que la tecnología está impulsando el sector y cambiando su futuro. “Lejos quedan ya los tiempos de simplemente limpiar, tonificar e hidratar. Ahora se busca escanear la piel para encontrar el maquillaje perfecto o detectar puntos negros con aplicaciones de móvil”, aseguran los citados expertos.
Según un informe de Allied Market Research, el sector de la belleza tenía un valor global de 380.000 millones de dólares en 2019 y se espera que alcance los 463.500 millones en 2027. Un crecimiento que vendrá de la mano del mayor uso de cosméticos entre los hombres para sus rutinas diarias, el cambio en los estilos de vida y el uso de la realidad aumentada.
Además, la venta de cosméticos se está viendo favorecida por las redes sociales, donde ‘influencers’ con millones de seguidores muestran complejos maquillajes y en las que los selfis tienen un gran protagonismo.
Dentro de esta industria, los analistas de Singular Bank destacan a China, “un mercado históricamente interesado en el cuidado de la piel y que en los últimos años se ha convertido en el segundo mayor del mundo, con una cuota del 12,7% de las ventas globales, solo por detrás de Estados Unidos”.
Dos tercios de las ventas en el país asiático proceden de productos de belleza, aunque los tratamientos considerados de lujo (terapias personalizadas para cada cliente) están avanzando a un ritmo mayor, resaltan estos expertos en base a datos ofrecidos por Euromonitor y JP Morgan.
Asimismo, cabe reseñar que el comercio electrónico en China está desempeñando un papel principal, al haber acercado a millones de consumidores de fuera de las grandes ciudades.
Aunque su peso es menor, el segmento de alta gama es el que muestra una expansión más veloz, sobre todo en Estados Unidos y China. “Solo en 2019, el mercado de los cosméticos de lujo registró un aumento de 12.650 millones de dólares, cifra que anticipa un aumento sostenido hasta 2025”, explican desde Singular Bank.
Así, el cuidado de la piel, uno de los servicios más caros y que más investigación precisa, cuenta con una elevada fidelidad de marca, ya que los clientes suelen ser leales a los productos que conocen y en los que confían. “Con la generación de los ‘millennials’ envejeciendo y con el uso del maquillaje como herramienta para reclutar a los nuevos clientes en artículos para el cuidado de la piel, los expertos consideran que el crecimiento de esta tendencia hacia las marcas de prestigio se consolidará".
Entre los ejemplos del uso de la tecnología para fidelizar a los consumidores en un mercado tan competitivo, Singular Bank menciona a Lancôme, filial de L’Oréal, que utiliza una máquina ('Opens Overlay') para escanear la piel y encontrar el color ideal. De esta forma, sus clientes pueden tener un maquillaje a la carta preparado en la misma tienda gracias a un algoritmo que da con la sombra perfecta entre miles de opciones.
El gigante de la belleza galo también se hizo con ModiFace, una empresa de realidad aumentada para simular resultados de maquillaje, peinados y tratamientos de piel partiendo de fotos o vídeos.
Por su parte, la japonesa Shiseido lanzó hace unos meses 'Optune', una máquina que elimina la necesidad de elegir productos para el cuidado de la piel. Una aplicación analiza la piel y selecciona la mejor mezcla y cantidad de producto para cada usuario. Asimismo, cuando los artículos del cliente están a punto de terminarse, se piden nuevos de forma automática.