La compañía suiza necesita tener el 95% del capital para decidir si saca a BME de bolsa
Solo un 7% de los accionistas de Bolsas y Mercados Españoles (BME) no aceptó la opa de Six. Parece un porcentaje insignificante, pero es muy importante conocer su composición porque la compañía suiza podría obligar a los accionistas minoritarios a deshacerse de sus títulos si estos suponen menos del 5% del capital. Es decir, si algún fondo con más del 3% todavía mantiene sus acciones, Six tiene derecho a solicitar una venta forzosa y excluir a BME de cotización.
Este proceso de venta forzosa se conoce como 'squeeze-out'. La ley estipula que se puede ejercer este derecho cuando el oferente haya alcanzado el 90% del capital, siempre y cuando no hayan pasado más de tres meses desde que finalizó el periodo de aceptación de la opa. También puede suceder en el sentido inverso, con los minoristas exigiendo que les compren sus acciones ('sell-out'). En cualquier caso, Six tendrá que pagar los 32,98 euros por título que se ofrecían en la oferta de adquisición.
Será a comienzos de la semana que viene cuando tenga que comunicar si los minoristas suponen menos del 5% del capital y, por lo tanto, se cumplen los requisitos para iniciar el 'squeeze out'. Pero no será una decisión unilateral, ya que la intención del nuevo propietario de BME es mantener un "estrecho diálogo" con la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) para determinar si ejecuta este proceso, tal y como se estipulaba en el folleto de la opa.
Para la compañía suiza es muy importante alcanzar el 95% del capital porque solo entonces podrá decidir si mantiene a BME en bolsa o le hace abandonar el parqué. En el folleto de la oferta, Six se comprometió a no excluirle de cotización si los accionistas minoristas representaban más del 5% del capital social, aunque la ínfima liquidez hace que tenga muy poco sentido mantener al holding cotizando, por lo que los suizos pretenden excluirla de cotización en uno o dos años, como contó 'Bolsamanía'.
El consejero delegado de Six, Jos Dijsselhof, pasó de puntillas por este tema. En una rueda de prensa telemática celebrada el pasado jueves, explicaba que "por ahora" no está entre sus planes que BME deje de cotizar. Insistió en que "solo pasaría si tuviésemos más del 95%, en principio no estamos ahí, así que hablar de 'squeeze-out' no es relevante ni oportuno por el momento".
La opa de Six fue positiva después de conocerse que la había aceptado el 93,16% de los accionistas, que tenían en su poder un total de 77,89 millones de títulos. Por lo tanto, a un precio de 32,98 euros por acción, tendrá que desembolsar 2.570 millones de euros. Al cierre de la sesión de este viernes, cotizaba en los 32,92 euros.
Varias entidades importantes se han llenado los bolsillos con esta operación. Según los registros de la CNMV, al menos un 25% del capital de BME estaba en manos de hasta 10 fondos de inversión, con JP Morgan como el más destacado al contar con un 6,05% de su capital. Entre los accionistas de referencia también estaban: BlackRock (3,83%), Lyxor (3,33%), Norges Bank (2,28%), Sand Grove (2,28%), Kite Lake Capital (2,06%), Farallon Capital (1,77%), Goldman Sachs (1,66), Syquant Capital (1,03%) y Boussard & Gavaudan (1,02%).