La compañía alemana abandona el mercado ruso con un impacto adverso de 600 millones
El grupo alemán de ingeniería Siemens obtuvo un beneficio neto atribuido de 1.034 millones de euros entre enero y marzo, segundo trimestre fiscal para la compañía, lo que representa una caída del 54,3% respecto del resultado contabilizado en el mismo periodo del ejercicio anterior, según ha informado la multinacional, que ha confirmado su retirada del mercado ruso.
En este sentido, Siemens ha precisado que su beneficio neto del segundo trimestre fiscal refleja un impacto negativo de 600 millones de euros en relación con Rusia, principalmente en el negocio de movilidad, después de las sanciones impuestas al país, en contraste con las ganancias extraordinarias de 900 millones por desinversiones contabilizadas en el segundo trimestre del ejercicio anterior.
"Hemos decidido llevar a cabo un proceso ordenado para cerrar nuestras actividades comerciales e industriales en Rusia", ha anunciado Roland Busch, presidente y consejero delegado de Siemens, quien ha recordado que la compañía alemana había estado presente en este mercado durante casi 170 años.
La cifra de negocio de Siemens entre enero y marzo de 2022 alcanzó los 17.040 millones de euros, un 16% por encima de los ingresos contabilizados en el segundo trimestre del ejercicio precedente, mientras que los pedidos recibidos aumentaron un 32% interanual, hasta 20.978 millones.
En concreto, el negocio digital de Siemens incrementó un 13% sus ingresos, hasta 4.565 millones, mientras que el área de infraestructuras inteligentes facturó 4.009 millones, también un 13% más. Por su parte, el negocio de movilidad de Siemens redujo un 6% su facturación, hasta 2.136 millones, mientras que la unidad de tecnología médica facturó 5.460 millones, un 38% más.
"En el segundo trimestre, Siemens continuó su camino de crecimiento y logró un sólido desempeño operativo. El aumento de los pedidos y los ingresos refleja nuevamente la confianza que nuestros clientes depositan en nosotros para respaldar la digitalización, la automatización y la sostenibilidad", ha destacado Roland Busch, añadiendo que en un entorno "extremadamente desafiante", el negocio de Siemens "sigue siendo sólido".
De este modo, en el primer semestre fiscal de Siemens, la compañía alemana obtuvo un beneficio neto atribuido de 2.677 millones de euros, un 26,5% menos que en el mismo periodo del ejercicio anterior, mientras que la cifra de negocio creció un 17%, hasta 33.537 millones de euros y los pedidos recibidos aumentaron un 42%, hasta 45.188 millones.
Para el conjunto del ejercicio, la compañía ha confirmado sus objetivos financieros y confía en alcanzar un crecimiento del 6% al 8% en los ingresos comparables.
En concreto, la multinacional espera que el área digital aumente su facturación comparable entre un 9% y un 12%, cuando previamente anticipaba un incremento del 5% al 8%, con un margen de beneficio del 19% al 21%.
Asimismo, en infraestructuras inteligentes la compañía confía en lograr un crecimiento de ingresos comparable del 6% al 9%, frente al 5% y 8% que esperaba anteriormente, con un margen de beneficio del 12% al 13%.
En cuanto al negocio de movilidad, si bien anteriormente esperaba un crecimiento de ingresos comparables del 5% al 8%, ahora espera ingresos al nivel del año anterior.