Aun no se ha confirmado que los fallecimientos sean producto de la inyecciones
Japón investiga la muerte de una tercera persona tras recibir una dosis de la vacuna de Moderna procedente de uno de los lotes fabricados por Rovi en España y bloqueados tras detectarse contaminación, para esclarecer si tiene relación con la inyección.
La crisis de la vacuna de Moderna en Japón, en la que se ha visto directamente implicada Rovi, ya que la española ha sido quien ha producido los lotes contaminados aparentemente en sus líneas de producción y que han causado el fallecimiento, supuestamente, de tres personas, saltó el pasado 26 de agosto.
Ese día, Rovi cayó con fuerza en bolsa tras confirmar la contaminación de varios lotes de la vacuna de Moderna. Posteriormente, Japón anunció la muerte de dos personas vacunadas con esos lotes, que fueron inmovilizados nada más conocerse la contaminación. Cabe subrayar que en todo momento tanto Rovi, como Moderna y Takeda Pharmaceutical, distribuidor de la vacuna de Moderna en Japón, al igual que el Gobierno japonés, han remarcado que no está comprobado que los fallecimientos se hayan producido por esta causa.
Las partículas contaminantes se observaron en 39 viales (390 dosis), pero Sanidad decidió bloquear tres lotes enteros con 1,63 millones de dosis (3004667, 3004734 y 3004956) producidos al mismo tiempo y en el mismo lugar como medida de precaución.