Gana 608 millones hasta marzo, un 0,3% menos, con el barril de Brent un 6% más barato
Repsol ganó 608 millones hasta marzo, ligeramente por debajo del beneficio neto de 610 millones registrado hace un año, en un entorno de precios de petróleo un 6% más bajo que en 2018. El beneficio neto ajustado, que mide específicamente la marcha de los negocios de la compañía, aumentó un 6%, 618 millones, indica la compañía.
Con el barril de Brent a 63,1 dólares de media en el primer trimestre, la compañía presidida por Antonio Brufrau considera que su desempeño muestra su "capacidad de adaptación y generación de valor en cualquier escenario".
El Ebitda de la compañía aumentó hasta 1.810 millones, por encima de los 1.804 millones registrados hace un año. La deuda neta a cierre del trimestre de Repsol se situó en 3.686 millones de euros, 247 millones de euros más con respecto al cierre del año 2018, debido principalmente a las operaciones discrecionales de compra de autocartera. No obstante, la compañía destacó que su sólida generación de caja operativa ha sido superior a los pagos por inversiones, dividendos e intereses.
UPSTREAM
En este contexto de precios más bajos, la división de Upstream (exploración y producción) incrementó su resultado en un 12,5%, hasta 323 millones. Repsol destaca que las medidas de eficiencia adoptadas "muestran su eficacia" en los resultados de este negocio y el hito exploratorio de este primer trimestre: el mayor descubrimiento en tierra realizado en Indonesia.
Entre enero y marzo, la producción de crudo se situó en 700.000 barriles equivalentes diarios de media, frente a los 727.000 barriles de hace un año, debido al cese de la actividad en Libia. Las operaciones en el país se reanudaron el pasado 4 de marzo. En los tres primeros meses del año, la compañía logró volúmenes adicionales de producción gracias a la conexión de nuevos pozos en Marcellus (Estados Unidos), Duvernay (Canadá) y Akacias (Colombia), a lo que se suma la adquisición de Mikel y Visund, en Noruega.
Además, llevó a cabo siete pozos durante el periodo, de los cuales cuatro tuvieron un resultado positivo, siendo el más destacado el del bloque Sakakemang, en Indonesia, donde la compañía realizó el mayor descubrimiento en tierra del mundo de los primeros tres meses del año y considerado como uno de los mayores registrados en los últimos doce meses.
DOWNSTREAM
En el área de Downstream (Refino, Química, Movilidad, GNL, Electricidad y Gas, etc.) el resultado fue de 404 millones (frente a los 425 millones hasta marzo de 2018), apoyado sobre todo en el Refino, Trading y Química, e influido de forma positiva por la apreciación del dólar frente al euro.
El área de Refino mejoró su comportamiento respecto a los primeros meses del año 2018, con una gestión más eficiente que contrarrestó el peor entorno internacional. La compañía llevó a cabo una parada programada de su refinería de Bilbao, en la que realizó una inversión de 52 millones de euros para incorporar mejoras tecnológicas, de eficiencia y de seguridad.
Además, Repsol llevará a cabo durante 2019 un extenso programa de mantenimiento en sus refinerías españolas para asegurar su máxima disponibilidad de cara a la entrada en vigor de la nueva normativa internacional de combustibles marítimos, que beneficiará competitivamente a la compañía.
Las inversiones del negocio de Downstream entre enero y marzo de este 2019 ascendieron a 189 millones de euros.
DIVIDENDO
Por otra parte, el pasado 27 de marzo, el consejo de administración de Repsol convocó para el próximo 31 de mayo la junta general, a la que propondrá una retribución al accionista equivalente a unos 0,525 euros brutos por acción. Con ello, la retribución total propuesta para el ejercicio, equivalente a 0,95 euros por acción, supone un aumento del 5,6%.
Asimismo, se propondrá la reelección como consejeros del presidente y consejero delegado de la compañía, Antonio Brufau Niubó y Josu Jon Imaz San Miguel, respectivamente, y de José Manuel Loureda Mantiñán, John Robinson West y Henri Philippe Reichstul.
También se propondrá el nombramiento como consejeras externas independientes de Aránzazu Estefanía Larrañaga y de María Teresa García-Milà Lloveras. Con estos últimos nombramientos, Repsol contará con cinco mujeres en el consejo de administración, que quedará reducido a 15 miembros.