Lo hace a petición del gobierno francés
La junta directiva del grupo Renault se reune este domingo, a petición del Gobierno francés, para estudiar la sustitución definitiva de Carlos Ghosn al frente del consorcio automovilístico, tras ser acusado en Japón de un supuesto caso de evasión fiscal y de malas prácticas.
El grupo galo asegura que está revisando la dirección de la empresa y buscando la mejor solución para el futuro de la misma tras la detención del directivo por no informar supuestamente sobre su salario real durante ocho años y por transferir pérdidas de inversión personal a Nissan Motor.
La ejecutiva de Renault y el Gobierno francés se reunieron este jueves con el consejero delegado de Nissan, Hiroto Saikawa, en Japón para valorar los posibles candidatos para reemplazar a Ghosn en la presidencia de Renault.
Jean-Dominique Senard, actual consejero delegado de Michelin, es uno de los posibles candidatos a ocupar el cargo. Sin embargo, tanto el Estado francés, que posee un 15% del capital del fabricante del grupo galo, como sus asesores están considerando otros candidatos a dicho puesto, ocupado de manera interina por el adjunto de Ghosn, Thierry Bolloré.
Pese a la actual presión que está sometiendo el Ejecutivo galo sobre Renault, hasta la fecha, ha apoyado la decisión de la compañía de mantener a Ghosn en el cargo hasta que el directivo sea juzgado en Japón por agravante de violación de confianza de Nissan y por comunicar unos ingresos menores de los que realmente percibió al frente del fabricante de automóviles nipón.
ACUSACIONES CONTRA GHOSN
Ghosn, al que el Tribunal de Distrito de Tokio ha negado la libertad bajo fianza, ha sido acusado formalmente de un agravante de violación de confianza por transferir temporalmente pérdidas de inversiones personales a Nissan en 2008, así como por subestimar su retribución por tres años hasta el 2018.
El directivo está acusado de comunicar a los supervisores nipones unos ingresos menores de los que realmente percibió. En concreto, de publicar una compensación económica por su responsabilidad al frente de Nissan de menos de la mitad de los 88 millones de dólares (77 millones de euros) que recibió durante cinco años desde 2010.
Además, la Fiscalía nipona también acusa a Ghosn, a Nissan y al exdirector representante del fabricante Greg Kelly de no haber declarado parte de las compensaciones recibidas por el máximo responsable de la empresa entre marzo de 2015 y marzo de 2018.
Ghosn se ha declarado inocente ante la Justicia japonesa y ha asegurado que fue acusado injustamente. "He sido acusado injustamente y detenido injustamente por acusaciones sin fundamento", ha subrayado.
Por su parte, Nissan y Mitsubishi también han acusado al directivo de cobrar de forma irregular 7,82 millones de euros de una 'joint venture' creada para explorar las posibles sinergias entre las dos firmas.