Musk ha vendido miles de millones de dólares de participaciones para financiar la compra de Twitter
Las acciones de Tesla no levantan cabeza, pero su CEO, Elon Musk, echa balones fuera y culpa al contexto macroeconómico de este declive. Musk ha vendido miles de millones de dólares de participaciones para financiar la compra de Twitter. Y desde que se reveló la participación inicial de Musk el 4 de abril, Tesla se ha dejado más de un 60%.
"A medida que los tipos de interés de las cuentas de ahorro bancarias, que están garantizadas, comiencen a acercarse a los rendimientos del mercado de valores, que no están garantizados, la gente moverá cada vez más su dinero de las acciones al efectivo, lo que hará que las acciones caigan", ha publicado Musk en su cuenta de Twitter.
Pero los analistas tienen una visión muy diferente. Creen que los inversores están preocupados por la debilidad de las ventas en China y por la distracción de Elon Musk con Twitter.
"La sugerencia de que podría llevar algún tiempo encontrar un nuevo director ejecutivo para la red social significa que Musk podría seguir teniendo su tiempo devorado por Twitter en lugar de volver a su trabajo diario principal de dirigir el negocio de vehículos eléctricos", señalan en AJ Bell.
En el último trimestre, las acciones de Tesla han caído un 48%, siendo uno de los varios valores de gran capitalización que han pasado de ganadores en los últimos años a perdedores en las carteras de los inversores durante 2022. "Ha llegado un punto en el que los inversores solo quieren que Musk deje de fastidiar y anteponga los intereses de Tesla a su ego", añade.
Tesla va camino de registrar el peor mes y el peor trimestre de su historia, "ya que la adquisición de Twitter suscita dudas sobre la dedicación de Elon Musk al gigante de los vehículos eléctricos. Tesla también se ha visto afectada este año por la subida de tipos y las presiones de la inflación, así como por la escasez mundial de chips, que han contribuido a su pérdida del 65% en lo que va de año. Quizá un nuevo consejero delegado en Twitter dé a Musk más tiempo para volver a centrarse en la oportunidad de los vehículos eléctricos", opinan en interactive investor.
"Había esperanzas de que la dimisión de Musk como consejero delegado de Twitter ayudara, pero parece que hasta que Musk no termine de quemar acciones de Tesla (¿lo está haciendo?) no hay nada que hacer", expresan en Markets.com.