"En las inmortales palabras de Winnie the Pooh: 'Qué suerte tengo de tener algo que hace que decir adiós sea tan difícil'", escribió
El nuevo CEO de Banco Santander, Andrea Orcel, se ha despedido del personal de UBS mediante un correo interno en el que destaca la fortaleza de la entidad suiza (de la que hasta ahora era miembro del comité ejecutivo y presidente de su banco de inversión) y muestra su reconocimiento por el trabajo realizado por todo el equipo.
Orcel dio las gracias a sus colegas por el "inmenso" honor de "servir en este negocio" y se refirió a la transformación radical del banco de inversión que él ha liderado. Andrea Orcel dijo que los cambios habían hecho, de un negocio "desenfocado y rezagado, que absorbía demasiados costes y destruía valor, un negocio enfocado y fortalecido, gastando menos capital y creando valor".
"Dejamos de intentar ser el mayor banco de inversión y nos concentramos en ser los mejores", escribió en su correo de despedida, según recoge MarketWatch.
Orcel elogió el trabajo del equipo, reconociéndolo por haber "entregado los mejores rendimientos de su clase por delante de sus colegas europeos y estadounidenses", así como por haber ascendido al primer puesto en el ranking de la revista Institutional Investor en 2017.
A título personal, Orcel describió el trabajo "para y con" el director general de UBS, Sergio Ermotti, como una gran experiencia, y concluyó con una cita:
"En las inmortales palabras de Winnie the Pooh: 'Qué suerte tengo de tener algo que hace que decir adiós sea tan difícil'".
Emilio Botín incluyó a Orcel entre sus asesores más cercanos y de mayor confianza. A la muerte de Botín en 2014, Orcel dijo que el mundo había perdido "uno de los líderes bancarios más importantes del mundo en una generación".
En su correo electrónico a UBS, Orcel destacó su estrecha relación con el Santander como razón para aceptar el puesto: "Créanme, les digo que no me habría ido por nada menos que por un cliente con el que he estado asesorando y trabajando durante toda mi carrera".