Tras la propuesta inicial de la compañía de 485 despidos los sindicatos siguen reclamando mejoras
Orange ha presentado a los sindicatos este lunes una nueva oferta para reducir a 430 los despidos y ha mejorado las condiciones para quienes se acojan al expediente de regulación de empleo (ERE) propuesto para la sociedad Orange Spagne y que, si hay acuerdo, será voluntario.
Esta oferta supone rebajar en 55 empleos la propuesta inicial de la compañía de 485 despidos. En la rebaja se incluyen 30 traslados que pasarán a trabajar en la filial de torres de Orange cuando esté operativa.
Asimismo, han elevado el número de días por año trabajado de la indemnización a los trabajadores generales a 55 días por año trabajado y elevado el tope de mensualidades a 32, según han confirmado fuentes sindicales a Europa Press.
Los sindicatos, no obstante, siguen reclamando que la empresa mejore las condiciones hasta, al menos, las de 2016, en las que, por ejemplo, no hubo topes para la indemnización. En la nueva oferta, se han incluido al cómputo para calcular este pago: retribuciones en especie, seguros de vida y otros conceptos para calcular el salario real anual del trabajador.
Asimismo, la empresa ha aumentado hasta 150 el número de prejubilaciones posibles para mayores de 55 años y se ha mostrado abierta a reabrir las prejubilaciones también el año que viene, cuando, según los sindicatos, un número mayor de personas sería elegible.
En la misma línea que los trabajadores generales, Orange ha modificado las condiciones ofrecidas para la oferta a los prejubilados y ha incluido un 25% de la variable real.
Las fuentes consultadas demandan una subida de la variable al nivel del salario fijo y que se tenga en cuenta la variable teórica, que es el indicador normalmente usado en las negociaciones salariales con la empresa. En la misma línea, también han requerido que el expediente de prejubilaciones se pueda abrir durante más años, como pasó en 2016.
Lo que permanece invariable son los 20 días por año trabajado mínimos por ley para los trabajadores que llegaron a la empresa desde 2018, un signo de que "no quieren que se vayan los jóvenes", según las fuentes sindicadas consultadas.
En caso de que hubiera acuerdo, se maneja un calendario en el que los trabajadores podrían empezar a apuntarse en julio. Los sindicatos reclaman que este se mantenga abierto hasta septiembre para permitir que especialmente en el caso de las prejubilaciones, los trabajadores tengan tiempo para ponderar la decisión.